La primera ministra argumenta que los recortes impositivos son necesarios para 'hacer que la economía se mueva'.
La primera ministra de Gran Bretaña, Liz Truss, defendió ayer jueves su plan económico y dijo que está dispuesta a tomar "decisiones difíciles" para impulsar el crecimiento.
En sus primeras declaraciones públicas desde que el gobierno anunció recortes impositivos sin fondos que sacudieron los mercados y arrastraron a la libra a mínimos históricos, Truss afirmó que el país enfrentaba una situación económica "muy muy complicada".
La mandataria indicó, sin embargo, que los problemas eran globales y estaban causados por la invasión rusa de Ucrania.
Las palabras de Truss llegaron un día después de que el Banco de Inglaterra tomase medidas de emergencia para estabilizar los mercados financieros británicos y evitar una crisis económica más amplia luego de que el ejecutivo asustó a los inversionistas con un programa de recortes fiscales sin financiación que provocó la caída de la libra y el alza del costo de la deuda pública.
Truss explicó que "tuvimos que tomar medidas urgentes para hacer que nuestra economía crezca, que Gran Bretaña se mueva y para hacer frente también a la inflación".
'TRAERÁ CRECIMIENTO'
Liz Truss ha insistido en que su polémico plan fiscal garantizará "el crecimiento económico a largo plazo", a pesar de su impacto negativo sobre la libra.
"Debemos poner a este país en una trayectoria de crecimiento a largo plazo, al tiempo que mantenemos la disciplina fiscal", afirmó en su cuenta de Twitter.
"Reducir los impuestos impulsará la inversión, lo que creará puestos de trabajo y oportunidades para todos", agregó.
Truss ha pasado la jornada defendiendo su "Plan de Crecimiento", que desde que fue anunciado el viernes ha provocado el desplome de la libra esterlina y una intervención de emergencia del Banco de Inglaterra para estabilizar el mercado de bonos de deuda pública a largo plazo.
La primera ministra conservadora mantiene que los recortes impositivos, criticados también por el Fondo Monetario Internacional (FMI) por ser inadecuados en un contexto inflacionista y fomentar la desigualdad, son necesarios para "hacer que la economía se mueva", aunque reconoció que "llevará tiempo" que se noten los beneficios.
Truss recordó que su Gobierno se ha esforzado por ayudar a los hogares al facilitar préstamos garantizados a las compañías eléctricas a fin de reducir la factura energética.
La primera ministra no ha especificado cómo se reducirá la deuda pública que se acumulará con todas estas medidas, lo que ha motivado las turbulencias en el mercado.
Por su parte, el ministro de Economía, Kwasi Kwarteng, ha indicado que se pedirá a los ministerios que recorten gastos y a la Oficina de responsabilidad presupuestaria (OBR, en inglés), que supervisa las finanzas públicas, que prepare para octubre un informe sobre el crecimiento, la inflación y la deuda.
Kwarteng prevé precisar su plan de reducción de la deuda neta a medio plazo en una intervención parlamentaria el 23 de noviembre cuando, según los expertos, es posible que anuncie recortes del gasto público o incluso algún cambio en su controvertido programa.