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La semana pasada comenté acerca de un estudio de la Universidad de Ohio acerca de los padres de familia que trabajan ambos. Este estudio revela que el 66% de ellos cumplen el criterio que define el agotamiento de los padres -un término no clínico que significa que ellos están muy exhaustos por la presión del trabajo y del cuidado de sus hijos y sienten que ya no tienen nada más que aportar-.
El reporte se publicó el 3 de mayo y se basó en entrevistas a 1,258 parejas de padres de familia que trabajan. Se llevo a cabo entre enero y abril del año 2021. Lo anterior fue cuando los Estados Unidos estaban inmersos en confinamientos pandémicos.
Los autores del estudio creen que el agotamiento aún está presente dado que los padres que trabajan no han tenido suficiente soporte práctico y estructural para sobreponerse al implacable estrés que no ha disminuido.
Aunque este estudio puede ser útil para los psicólogos, los investigadores lo realizaron directamente para los padres que trabajan. Incluye una escala de agotamiento que esperan que los padres usen para medirse ellos mismos cómo están haciendo el cuidado de sus hijos. Los padres que experimentan agotamiento leve pueden llevar a cabo algunos cambios que evitarán un agotamiento severo.
Presento aquí el cuestionario que se utiliza para saber el nivel de agotamiento de los padres que trabajan. Es una escala de 10 preguntas que puede ayudar a los padres y a los psicólogos para determinar si se está agotamiento y en qué nivel.
1. ¿Está o se siente irritado(a) fácilmente por sus hijos?2. ¿Siento que ya no soy el buen padre (o madre) que solía ser con mis hijos?3. ¿Me despierto exhausto(a) solo de pensar que es otro día más que tengo que cuidar a mis hijos?4. ¿Disfruto la paternidad de mis hijos?5. ¿Me siento culpable de ser una madre que trabaja fuera de casa porque esto afecta mi cuidado hacia ellos?6. ¿Me siento como un padre (madre) que estoy en modo de "supervivencia"?7. ¿Ser padre de familia es muy estresante?8. ¿Pierdo el temperamento muy fácil con mis hijos?9. ¿Me siento abrumado(a) tratando de balancear mi trabajo con mis responsabilidades parentales?10. ¿Estoy haciendo un muy buen trabajo como padre (madre)?
Califique las respuestas. Para cada pregunta, excepto las preguntas 4 y 10, use los siguientes valores: No del todo cero puntos. Un poco 1 punto. Algo más que poco 2 puntos. Moderadamente 3 puntos. Mucho 4 puntos.
Para las preguntas 4 y 10, use los siguientes valores: No del todo 4 puntos. Un poco 3 puntos. Algo más que poco 2 puntos. Moderadamente 1 punto. Mucho cero puntos.
Sume todos los puntos de cada respuesta. De cero a 10 puntos. no hay agotamiento. Usted puede continuar haciendo sus actividades en casa y en el trabajo y recordar poner prioridades en sus actividades. De 11 a 20 puntos agotamiento ligero. Empezar a tomar acciones preventivas tales como tomar descansos durante el día para recuperarse para reforzar la salud mental y el bienestar, tomar medidas de apoyo para disminuir el estrés.
De 21 a 30 puntos agotamiento moderado. Considere pedir ayuda profesional si su agotamiento interfiere con su habilidad para funcionar o concentrarse. De inmediato acuda con un psicólogo. El pedir ayuda profesional es una fortaleza, no una debilidad. Más de 31 puntos agotamiento severo. Pida ayuda profesional y de su familia, conéctese con sus amigos, utilice todos los recursos disponibles.
En el caso de las madres de familia que trabajan fuera de casa, se determinaron factores que están directamente asociados al agotamiento: el número de niños que hay en casa, el sentimiento de ansiedad de la madre, tener hijos que han sido diagnosticados con déficit de atención, desordenes hiperactivos, y preocupaciones de que alguno de los niños tenga un desorden mental.
El agotamiento también está ligado fuertemente con la depresión, la ansiedad y el consumo de alcohol. También esta ligado con la probabilidad de prácticas de crianza punitivas tales como insultos, críticas, gritos, abusos físicos. Los hijos de padres que sufren agotamiento parental son más propensos a afrontar aislamiento y problemas de atención, peleas con otros niños, no atender las reglas, sentirse infelices, estar preocupados.
El agotamiento parental afecta a los hombres significativamente, la diferencia con las mujeres es que ellos tratan de resolver solos el problema en lugar de buscar ayuda profesional. Un síntoma común del agotamiento parental en hombres es el cinismo -una mezcla de pesimismo e irritabilidad- que puede filtrarse hacia otras áreas de la vida, como las relaciones con los demás. Lo anterior provoca en estos hombres ineficiencia y baja productividad.
Fuente de referencia: Kate Gawlik y Barnadette Mazurek Melnyk.
