(ANGELO CARCONI / EFE)
Uno de los heridos hoy en un tiroteo en una junta de vecinos en Roma que dejó tres muertos, una mujer de 50 años con una lesión en el cráneo, se encuentra grave con pronóstico reservado mientras que otras tres personas han sido hospitalizadas.
La mujer ha sido operada e internada en la unidad de reanimación del hospital romano de Sant'Andrea, según informó en un comunicado el asesor regional de Sanidad, Alessio D'Amato.
El tiroteo tuvo lugar en torno a las 9:30 horas (8:30 GMT) de este domingo en las instalaciones de un bar de la vía Monte Giberto, en el barrio periférico de Fidene, al norte de la ciudad, donde se celebraba una reunión de vecinos.
En este momento uno de los inquilinos de la comunidad accedió al local, cerró la puerta y abrió fuego contra los administradores para después disparar a otros convecinos, asesinando a tres mujeres que participaban en la junta.
Además de la mencionada mujer en reanimación, el tiroteo se saldó con otros tres heridos de distinta consideración.
Son un hombre de 67 años herido en el rostro e ingresado en el hospital Gemelli, una anciana de 80 años con un impacto en el tórax y hospitalizada en el Umberto I y un hombre de 65 años que se desmayó y fue trasladado en estado de shock al hospital Sandro Pertini.
El alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, confirmó y lamentó este "gravísimo episodio de violencia que ha conmocionado a la ciudad" y expresó su "cercanía" a las familias de las tres víctimas y del resto de damnificados por el suceso.
El autor de los disparos, un hombre de 57 años, fue localizado, desarmado y arrestado por los agentes del cuerpo de los carabineros (policía militarizada) y ya se encuentra en dependencias policiales.
Por el momento se desconocen las razones del suceso aunque según las primeras reconstrucciones el origen son las desavenencias entre el homicida y los administradores del inmueble.
Los vecinos han asegurado a la RAI que conocían al agresor, al que describen como "cerrado" y "reservado", y al parecer mantenía un litigio con la comunidad, a la que ya había amenazado en el pasado.
Fueron ellos los que dieron la voz de alarma llamando enseguida a los servicios de emergencia, que enviaron al lugar a la policía y cuatro ambulancias.
Gualtieri ha convocado para mañana una reunión del comité para el orden y la seguridad pública.
