Ayer, un grupo de trabajadores exhibió la situación que guarda la unidad de salud.
En la clínica hospital del ISSSTE de Gómez Palacio "se está trabajando con lo que hay" y la situación se recrudeció con la pandemia por la COVID-19. A veces, se tiene que pedir a familiares que compren algunos medicamentos para la atención de los pacientes y también hay médicos y personal de enfermería que por su cuenta adquieren el material para garantizar el servicio de urgencia a la derechohabiencia.
Ayer, un grupo de trabajadores exhibió la situación que guarda la unidad de salud y además denunciaron deficiencias en la infraestructura física. Hay plafones caídos, filtraciones de agua por las lluvias, sanitarios insuficientes, fugas, no hay agua caliente y constantemente fallan los elevadores por donde se transportan los alimentos de los pacientes y la ropería.
Víctor Eduardo Palacios, secretario de Conflictos de la delegación XV del Sindicato del ISSSTE, dijo que tienen desabasto de analgésicos y antibióticos. Tienen problemas con la oxitocina para las mujeres embarazadas, con las soluciones para diluir los medicamentos y de cuatro ambulancias, sólo funciona una.
"Se le está dando una solución para cada paciente para 24 horas, para los ortopedistas yesos para poner férulas, suturas en quirófanos… se está trabajando con lo que hay, desafortunadamente se tiene a veces se tiene que pedir al familiar que compre el medicamento, no se tiene que pedir al familiar porque el Instituto tiene que darlo", expuso.
En esta protesta, los trabajadores también manifestaron su inconformidad por algunos movimientos que se están realizando en el estacionamiento del hospital y por el cambio de lugar de los lockers que para ellos, es inseguro. Cabe hacer mención que la delegación estatal del ISSSTE Durango es quien tiene el control de los recursos que llegan al estado por parte de la Federación por lo que las direcciones de los hospitales sólo fungen como gestores.