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El Ministerio de Economía y Finanzas de Perú revisó este jueves a la baja la proyección del crecimiento de la economía del país para 2022 tras pronosticar una escalada del 3.3 %, tres décimas menor al 3.6 % proyectado en abril pasado.
Según el Marco Macroeconómico Multianual publicado en el diario oficial El Peruano, el producto interno bruto (PIB) peruano podría cerrar 2022 con una subida del 3.3 %, en medio de la crisis política interna y los efectos externos de la guerra entre Rusia y Ucrania.
Esta revisión a la baja, según el documento, se debe principalmente a los choques de oferta transitorios que han incidido en el desempeño de los sectores primarios en la primera mitad del año y a las condiciones externas desfavorables ante la ralentización de la demanda externa, el ajuste de precios de las materias primas y las presiones inflacionarias.
Además, el Gobierno mantiene en 0 % la proyección de la inversión privada para este año y reduce la estimación de la inversión pública del 11 % al 8.5 %.
Por otro lado, prevé que las exportaciones crezcan un 4.8 % y que la inversión minera caiga un 2,1 %, lastrada por la finalización del proyecto minero Quellaveco.
Para 2023, el Ejecutivo proyecta un crecimiento del 3.5 % y, en ese sentido, señala que entre los factores que ayudarán a contrarrestar los efectos negativos en 2022 figura una eventual disipación de conflictos sociales en el sector minero y menciona, en concreto, la normalización de operaciones de la gran mina Las Bambas, productora del 2% del cobre mundial.
Entre 2024 y 2026, el Ejecutivo espera que la actividad económica crezca en promedio un 3.3 %, una subida explicada por el mayor volumen de exportaciones y la resiliencia de la demanda interna, especialmente por la mayor dinámica de la inversión privada en un entorno de recuperación de la confianza de los inversionistas, entre otros.
Sobre las finanzas públicas, el Gobierno prevé para este año un déficit fiscal del 2.5 % del PIB y una deuda pública del 34.9 %, que espera que se reduzca gradualmente en los próximos años hasta alcanzar el 32.5 % del PIB en 2026 y el 26.6 % del PIB en 2040.
"Dichos niveles de deuda pública son significativamente inferiores a la deuda pública promedio de países emergentes (cerca del 75 % del PIB) y de América Latina (cerca de 70 % del PIB) para 2026", se lee en el documento.
Según reportó esta semana Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la economía peruana registró un avance del 3.5 % en el primer semestre de 2022, tras cerrar el año pasado con un avance del 13.31 %, luego de la histórica recesión que sufrió en 2020, cuando se desplomó un 11.12 %.
