La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) reportó 76 mil autos usados importados legalmente entre enero y abril pasado. (ARCHIVO)
Los coches que se venden en la frontera norte tienen la mayor alza de precios del país, aun con la sobreoferta de unidades que se esperaba por la regularización de los autos chocolate. A escala nacional, los vehículos con modelo máximo de tres años se encarecieron en promedio 9% y superaron a la inflación general, cuya tasa fue de 7.7% en abril con relación al mismo mes de 2021, reportó el Inegi.
Sin embargo, las agencias de automóviles establecidas en la zona fronteriza con Estados Unidos subieron sus precios 10.2% y ligaron seis meses con incrementos a tasas de doble dígito. Se trata de la región, de las siete en las que el Inegi divide el territorio nacional, donde más se encarecieron los vehículos. Baja California y Chihuahua reportaron la mayor carestía, con subidas de 10.5% en cada estado; seguidos de Tamaulipas, donde los autos son 10.4% más caros que hace un año.
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Todas las marcas del grupo automovilístico alemán han empeorado las ventas, excepto Lamborghini y BentleyEl pasado 19 de enero, el presidente Andrés Manuel López Obrador publicó un decreto para regularizar más de 2 millones de vehículos que entraron de manera irregular al país, la mayoría provenientes de Estados Unidos y que son popularmente conocidos como autos chocolate. El objetivo es mejorar la seguridad dándoles certeza jurídica a los propietarios, debido a que unidades de este tipo son usadas por grupos criminales para cometer delitos.
Con un pago único de 2 mil 500 pesos por unidad, el proceso de regularización inició el 15 de marzo y estará vigente hasta el 20 de septiembre próximo en 12 estados: Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Coahuila, Durango, Michoacán, Nayarit, Nuevo León, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas y Zacatecas. La Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) estimaba que la legalización traería consigo un abaratamiento de hasta 20% en los vehículos usados del mismo año, debido a que la medida generaría una sobreoferta de unidades.
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El número de automóviles fabricados en el país fue de 251 mil 547 unidades durante abril"El propietario al ver que su unidad usada cuesta menos decidirá posponer su venta o retardar su renovación, afectando aún más la cadena de comercialización de cambio de usado a seminuevo, o de seminuevo por uno nuevo", estimó. No obstante, la regularización está resultando "un verdadero desastre", debido a la incapacidad del Registro Público Vehicular (Repuve) para realizar un mayor número de legalizaciones por la falta de recursos y acuerdos con los estados beneficiarios, a fin de culminar en tiempo y forma con el encargo del presidente López Obrador, señaló Guillermo Rosales Zárate, presidente ejecutivo de la AMDA.
"Nuestra principal preocupación ahora es que se autorice una ampliación al actual decreto para cumplir con la meta que tienen ante el magro desempeño del Repuve", advirtió. La semana pasada, la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Rosa Icela Rodríguez, informó que, del 18 de marzo al 11 de mayo, se habían legalizado poco más de 44 mil autos chocolate, aunque la cifra aumentará en los siguientes días debido a que se tienen agendadas 175 mil citas para realizar el proceso.
La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) reportó 76 mil autos usados importados legalmente entre enero y abril pasado, siendo el mayor volumen desde 2014 para un periodo similar. Esta cifra incluye los vehículos que se comenzaron a regularizar por el decreto y los que fueron importados bajo la ley.
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La escasez de chips continúa afectando a la producción de vehículosLa consultoría Kaso y Asociados calcula que el precio promedio de un vehículo en el país ya ronda el medio millón de pesos, luego de alzas significativas, no sólo de materiales como el acero, aluminio y resinas plásticas, sino por el desfasamiento en la producción de algunos insumos y cuellos de botella en la red de distribución por la pandemia. Además, ante la migración hacia la fabricación de coches eléctricos, hay otros materiales que están presionando a la industria para incrementar el precio de sus vehículos como el cobalto, litio, níquel, zinc y magnesio.
Para Rosales Zárate, la incertidumbre en el inventario persiste, así como el embate inflacionario del lado del consumo. "Para los próximos meses, se continúa con la previsión de incertidumbre, enfrentando el deterioro del entorno económico".