Se corre el riesgo de que el gobierno, con tal de mantener balanceadas las finanzas públicas, temporalmente genere un mayor subejercicio en el gasto en inversión física. (ARCHIVO)
Sí bien el programa para combatir la inflación y carestía que anunció esta mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador no se refiere a un control de precios, las medidas implicarán un mayor gasto público, consideró la directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base, Gabriela Siller.
Lo anterior, generará presiones a las finanzas públicas e incrementará la posibilidad de un recorte a la calificación crediticia de México, advirtió.
En el análisis diario que elabora la especialista sobre la apertura del mercado cambiario, destacó que el peso inicia la sesión con una apreciación de 0.39% o 7.9 centavos, cotizando alrededor de 20.21 pesos por dólar, con el tipo de cambio tocando un mínimo de 20.2071 y un máximo de 20.3076 pesos.
Siller incluyó un comentario sobre el programa del gobierno federal para enfrentar la inflación que presentó el secretario de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Ramírez de la O hace unos momentos.
"Las medidas implican un mayor gasto público y aunque el presidente mencionó que los recursos saldrán de los excedentes petroleros, es poco probable que estos excedentes logren cubrir todos los estímulos propuestos, incluyendo los relacionados con el precio de la gasolina", advirtió.
Anticipó se corre el riesgo de que el gobierno, con tal de mantener balanceadas las finanzas públicas, temporalmente genere un mayor subejercicio en el gasto en inversión física.
Con esto, el gobierno seguirá frenando el crecimiento económico en lugar de impulsarlo, pues el gasto en inversión física tiene el potencial de generar un efecto multiplicador sobre la economía, alertó.