Pese a las lluvias registradas en otras regiones el mes de julio quedó a deber en precipitaciones, hay lugares donde no ha caído ni gota.
Aunque en algunos municipios se han registrado lluvias de consideración en los últimos días, todavía hay regiones en donde no se cuenta con la humedad que se requiere.
Julio está por terminar y ha quedado a deber en cuanto a lluvias; si bien, en municipios como Tamazula, Tepehuanes, El Oro y Pueblo Nuevo, se han registrado fuertes aguaceros de forma reciente, hay lugares en donde todavía no cae ni gota, o no lo suficiente.
En el caso del municipio de Durango, las precipitaciones que se han registrado en las últimas semanas han sido suficientes para teñir el campo de color verde; no obstante, falta mucho para que tengan la utilidad que se requiere.
Hasta el momento, la evolución de almacenamiento en la mayoría de las presas de la entidad es negativo, es decir, hay extracción, pero no hay ingreso, o bien, este todavía es imperceptible.
Esto se puede cotejar con el estado en que se encuentran los diversos afluentes que abastecen a las presas, como los de Durango, en los que todavía no se ve agua correr.
El año pasado, a estas alturas, los arroyos cercanos a la ciudad de Durango llevaban grandes cantidades de agua, como el identificado como Río Chico.
No obstante, a la fecha, en el cauce de dicho afluente, solamente hay algunos tramos con agua estancada, grandes cantidades de rocas y arena, en espera de las corrientes provenientes de las partes altas.
Ante dichas condiciones, se espera que en agosto el temporal mejore de forma considerable, con relación a lo que se tuvo en julio, en beneficio del sector agropecuario y del propio ecosistema.