Durante el cuarto mes del 2022, el Banco Central reportó que se realizaron 12 millones de operaciones para transferir 391 dólares en promedio. (ARCHIVO)
En un entorno de alta inflación, en abril, las remesas enviadas por los mexicanos que trabajan en el exterior, principalmente en Estados Unidos, anotaron el mejor mes en lo que va del año con un monto captado de 4 mil 718 millones de dólares.
Dicho monto fue superior al consenso de analistas que esperaba 4 mil 450 millones de dólares.
Con ello, midieron fuerzas contra la inflación, y salieron airosas durante el cuarto mes del 2022.
Lo anterior significó un aumento de 16.5% en comparación a igual mes del año pasado, según dio a conocer el Banco de México (Banxico).
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La cifra representa un descenso del 11.5 por ciento con respecto al trimestre inmediato anteriorDurante el cuarto mes del 2022, el Banco Central reportó que se realizaron 12 millones de operaciones para transferir 391 dólares en promedio.
Así, de enero a abril del presente año, dichos flujos acumularon un monto de 17 mil 240 millones de dólares, es decir el 17.57% más respecto a igual periodo del año previo.
Se realizaron un poco más de 45 millones de operaciones de remesas, el 11% superior si se compara con las del primer cuatrimestre del 2021.
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La entidad se ubicó en el décimo lugar de los estados que reciben menos remesasEl promedio enviado por cada paisano fue de 383 dólares, lo que representó un aumento de 6.06% sobre lo que se registró de enero a abril del 2021.
COMPARATIVO DETALLADO
Durante los primeros cuatro meses de 2021, el envío de remesas por parte de los migrantes mexicanos al país acumuló 14 mil 664 millones de dólares mientras que en lo que va de 2022 el monto asciende a los 17 mil 240 millones de dólares, un incremento del 17.6 por ciento aproximadamente.
Durante el mes de abril, la variación fue de 0.5 por ciento y queda rezagada respecto al incremento de marzo al mismo periodo del año anterior que creció en un 20 por ciento, es decir, que el envío de remesas a comienzo del segundo trimestre de 2022 refleja ya la desaceleración de la economía norteamericana básicamente por los efectos inflacionarios del vecino país del norte.