Vaya si ha sido complicado para el cuerpo técnico de los Algodoneros de Unión Laguna, integrar un sólido staff de abridores, la poca efectividad de los 11 inicialistas que se han utilizado, ha traído como consecuencia, el cargar de trabajo al bullpen, en donde el exceso de actividad ya hace rato hizo mella en los brazos más importantes. De los cinco lanzadores que conformaban el staff al arrancar la temporada, solamente quedan dos, y fueron incluidos Rafael Pineda y Jordan Guerrero, quienes hoy pertenecen al cuerpo de relevistas. Elementos como Austin Biben-Dirkx, Alex Gallegos y Jordan Kipper, tuvieron un paso efímero en esa importante función del pitcheo.
Aldo Montes, Luis Gámez, Jordan Guerrero, Austin Biben-Drkx, Alex Gallegos, Rafael Pineda, Jordan Kipper, Josh Corrales, Casey Harman, Josh Smith y Dave Richardson, son los brazos que tanto Óscar Robles como Ramón Orantes han utilizado como inicialistas. Aldo Montes y Luis Gámez en nueve ocasiones han caminado cinco entradas o más en sus juegos. Jordan Guerrero lo ha conseguido dos veces, al igual que Rafael Pineda; Jordan Kipper sólo pudo hacerlo una vez, Josh Corrales lo consiguió hasta hora en tres ocasiones, mientras que Casey Harman lleva seis, por tres de Josh Smith y dos de David Richardson. Mucho ojo con la condición física de los lanzadores.
Así es en números la actuación del pitcheo inicialista de Unión Laguna, en donde esta temporada se ha dado prioridad a los lanzadores de relevo para ocupar una plaza en la rotación de abridores. El récord de los inicialistas de Unión Laguna es de 17-19 en ganados y perdidos, una cifra muy pobre, después de 71 juegos jugados, sin contar el de anoche, segundo de la serie frente a los Tigres de Quintana Roo. Jordan Kipper fue una cara nueva que nada aportó, al igual que su compatriota, Austin Biben-Dirkx. Rafael Pineda tuvo como abridor, una actuación demasiado inferior a la de 2021, mientras que Alex Gallegos, en una apertura no consiguió ni un solo tercio, frente a los Generales de Durango.
En números Aldo Montes y Luis Gámez están a la cabeza con nueve juegos de cinco o más innings, y junto a los estadounidenses, Josh Smith y Casey Harman, son la parte medular en el pitcheo abridor de Unión Laguna, el cual requiere de brazos contundentes. Si Algodoneros aspira a una actuación relevante en este 2022, necesita de esos brazos bien descansados y en buen momento, porque a estas alturas del calendario regular, la fatiga puede aparecer y con esa situación se deben tener demasiadas precauciones. El relevo, en brazos importantes como Josh Lueke y Peter Tago, está en problemas para preparar los juegos a Lueke.
Pero la ofensiva es un departamento en donde hoy se nota una gran vulnerabilidad y no se ve por donde enderezar el camino. La situación era complicada, pero al salir Zach Kirtley se puso más difícil, ha llegado un jugador muy cumplidor, como el panameño Allen Córdoba. Elementos como Yangervis Solarte, Fernando Flores y Adrián Tovalín, están muy por debajo de lo que este equipo necesita, por lo que el peso de la ofensiva hoy lo cargan; Jesse Castillo, Nick Torres y Édgar Robles; Solarte, Fernando Flores y Tovalín, necesitan producir mucho más con su bate para ser rentables.
La directiva tomó la decisión de no reforzarse y eso es un gran riesgo, porque Tijuana, Monterrey, Dos Laredos y hasta Saltillo, tienen equipos muy fuertes, porque han hecho ajustes cuando lo consideraron necesario. Si Algodoneros logra meterse a la postemporada, su primer rival podría ser Tecolotes, Dos Laredos, sin descartar a Tijuana, Monclova y Monterrey, cualquiera de esos cuatro rivales que le toquen a Algodoneros, saldrá como amplio favorito, y en las condiciones que está el equipo de Ramón Orantes, el reto será infranqueable, y el objetivo primario no se habrá conseguido, para lograrlo hay que estar en el segundo playoff.
