(HANNIBAL HANSCHKE / EFE)
Una andana de misiles crucero y drones rusos impactaron el lunes infraestructura vital en Kiev, Járkiv y otras ciudades ucranianas, afectando el suministro de luz y agua en represalia por lo que Moscú señaló que fue un ataque de Ucrania contra su flota en el mar Negro.
Rusia ha intensificado sus ataques contra las plantas de generación eléctrica y demás infraestructura, obligando a Ucrania a realizar cortes programados al servicio eléctrico mientras la guerra se adentra a su noveno mes.
"El Kremlin se está vengando por sus fracasos militares con personas pacíficas que se quedan sin electricidad ni calefacción antes de la llegada del invierno", dijo el gobernador de la región de Kiev, Oleksii Kuleba.
El presidente ruso, Vladimir Putin, confirmó que el bombardeo del lunes tenía como objetivo tomar represalias por lo que, según él, fue el infructuoso ataque ucraniano con drones aéreos y submarinos contra la Flota del Mar Negro, con sede en Sebastópol, en la península de Crimea.