(ESPECIAL)
La posibilidad de que el capo Miguel Ángel Félix Gallardo, alias "El Jefe de Jefes", cumpla su sentencia en prisión domiciliaria como lo ordenó un juez en septiembre, se ve cada vez más lejana este año.
Y es que ante la imposibilidad de cubrir los requerimientos que la autoridad le solicitó, la empresa que le iba a colocar el brazalete electrónico de localización y vigilancia para cumplir con el traslado a su domicilio para continuar con la pena de 40 años de cárcel que está compurgando por narcotráfico y acopio de armas, dio por terminado el contrato de arrendamiento y prestación de servicios de monitoreo y emisión de alertas.
Por lo que, un juez federal dejó, por el momento, sin efectos la continuación del desahogo de la diligencia relativa a la colocación del brazalete electrónico a Félix Gallardo, quien seguirá recluido en el penal estatal de Puente Grande, Jalisco.
Sin embargo, dejó a salvo los derechos del capo para efecto de cumplir con los requisitos establecidos en la resolución del nueve de septiembre de 2022, dictados en la causa penal de origen, para la materialización de la sustitución de la pena que actualmente se encuentra compurgando, por las medidas de seguridad que le fueron impuestas.