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El Banco Central de Sri Lanka (CBSL) anunció este jueves el "buen progreso" de las conversaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y señaló que esperan alcanzar a finales de agosto un acuerdo inicial entre personal técnico para obtener un préstamo que alivie la grave crisis que padece la isla.
"La misión del FMI planea venir a finales de mes con la intención de completar o llegar a un acuerdo entre el personal técnico sobre el paquete de medidas" tras lograr cumplir los objetivos, indicó en un rueda de prensa el gobernador del CBSL, Nandalal Weerasinghe.
Cuando alcance el acuerdo con el FMI, Sri Lanka intentará negociar con los acreedores una reestructuración de la deuda, tras anunciar la suspensión de pagos el pasado abril.
"Estamos haciendo algunos estudios y, en base a ellos, y en cuanto alcancemos un acuerdo, contactaremos con todos los acreedores bilaterales y comerciales", explicó el gobernador del banco central.
Sri Lanka acudió al FMI para alcanzar un programa de rescate financiero en medio de la peor crisis económica de su historia, provocada en parte por la falta de divisas extranjeras y la consecuente escasez de combustible y productos de primera necesidad.
Las reservas estimadas a finales de julio son de 1.800 millones de dólares.
La nación isleña se encamina "hacia una contracción de la actividad mayor a la esperada y un alivio (también) más rápido de lo esperado de las presiones sobre los precios, en comparación con la revisión anterior", explicó el CBSL en un comunicado.
En este sentido, el país espera que "las políticas monetarias y fiscales contractivas que ya existen, junto con las medidas para reducir los gastos de importación no urgentes, den como resultado una contracción notable en el crédito al sector privado y posibles riesgos al alza para el desempleo en el corto plazo".
Sin embargo, se han registrado importantes avances en el sector externo, debido a la mejora de la liquidez y la asistencia financiera, lo que ha supuesto una mayor distribución de artículos esenciales, como combustible, medicamentos o fertilizantes, añadió el CBSL.
Las colas en las gasolineras parecen haber desaparecido, pero la situación en la isla está lejos de ser normal, con los precios de los alimentos con un aumento interanual del 90%, además de niveles de inflación que alcanzaron el 60.8% el pasado julio.
La que sí parece haberse estabilizado es la realidad política del país con la huida tras meses de protestas del ex presidente Gotabaya Rajapaksa, acusado de corrupción e inoperancia, y la elección posterior del nuevo mandatario, Ranil Wickremesinghe, algo que el banco central espera que contribuya positivamente en la economía.
Así Sri Lanka prevé que el crecimiento real del PIB "se recupere en el próximo período, con la estabilización prevista de las condiciones macroeconómicas y la implementación de reformas estructurales en la economía", sentenció el organismo.
