Musk dijo que Twitter suspenderá permanentemente a cualquier cuenta que se haga pasar por otra. (ARCHIVO)
Desde el pasado 27 de octubre Elon Musk se convirtió, de manera oficial, en el nuevo dueño de la red social Twitter, compra que ha dividido opiniones entre usuarios, influencers, celebridades y políticos.
Con esta compra se avecinan muchos cambios para una de las redes sociales más utilizadas por los líderes de opinión. Algunos famosos y personajes célebres han decidido cerrar su cuenta, como la modelo Gigi Hadid.
Ayer domingo Musk aseguró que su misión es convertir Twitter en la fuente de información más precisa del mundo. "Twitter necesita convertirse, con diferencia, en la fuente de información más precisa del mundo. Esa es nuestra misión", dio a conocer en un tuit.
"Mi compromiso con la libertad de expresión se extiende, incluso, a no prohibir la cuenta que sigue a mi avión, aunque eso es un riesgo directo para la seguridad personal", agregó. "Poder para el pueblo", finalizó.
A consecuencia del cambio de propietario se ha reducido, a nivel mundial, la fuerza laboral de la plataforma (incluido México) y se añadió el servicio de suscripción por 8 dólares al mes, que incluye la marca de verificación azul. De esta manera los usuarios podrán tener la marca azul junto a sus nombres tal como las celebridades, empresas y políticos.
En medio de esta controversia la empresa se acercó a empleados despedidos para pedirles que regresen a sus puestos debido a que se dieron cuenta de que su experiencia y trabajo pueden ser necesarios para construir el nuevo camino de la red social, aseguran fuentes de medios internacionales.
Cabe destacar que en el contexto político hay mucha incertidumbre respecto al poder que tiene ahora Twitter, una red que suele ser utilizada para difundir información, tanto por medios de comunicación como usuarios y políticos, entre otros.
Personajes como Donald Trump han sido suspendidos de la red social al ser señalados de incitar a la violencia, como ocurrió a principios del 2021, cuando un grupo de personas simpatizantes del expresidente entró a la fuerza a la Casa Blanca durante el cambio de poder en Estados Unidos.
Al respecto, Joe Biden, actual presidente, se pronunció y resaltó que le preocupa que Twitter se convierta en un espacio que difunda mentiras, además ha señalado la importancia de que las redes sociales tomen medidas para reducir los discursos de odio y la desinformación.
Elon Musk, quien concretó la compra de Twitter por 44,000 millones de dólares, había hablado en mayo sobre la posibilidad de abrir la puerta a Trump para que regrese a Twitter, donde el republicano se mantenía en contacto con sus más 88 millones de seguidores.
Cabe mencionar que la ONU advirtió a Musk que no debe haber lugar para el odio en la red del pajarito azul. "Twitter tiene una responsabilidad a la hora de evitar que se difunda contenido que dañe derechos de las personas", señaló la carta abierta del alto comisionado Volker Türk, en la que también indicó que "la libertad de expresión se termina cuando hay discursos del odio que incitan discriminación, hostilidad o violencia".