Se pronostica una caída en la producción económica en el último trimestre de este año y los primeros meses de 2023. (ARCHIVO)
La comisión ejecutiva de la Unión Europea redujo su pronóstico de crecimiento económico para el próximo año al decir que 19 países que usan la moneda euro entrarán en recesión durante el invierno, en un momento en que el punto máximo de la inflación se mantiene más tiempo de lo anticipado y los elevados costos del combustible y calefacción afectan el poder adquisitivo del consumidor.
El pronóstico de otoño de la Comisión Europea, publicado el viernes, pronostica una caída en la producción económica en el último trimestre de este año y los primeros meses de 2023.
La comisión señaló que se anticipa que los altos costos energéticos, un aumento en el costo de vida, tasas de interés más elevadas y una ralentización en el comercio global “arrastren a la UE, la zona euro y a la mayoría de los Estados miembros a recesión en el último trimestre del año”.
Hacia el futuro, los pronósticos de crecimiento para todo el 2023 se redujeron a 0.3% del 1.4% anticipado en el pronóstico de julio.
“La economía de la UE está en un punto de inflexión”, dijo Paolo Gentiloni, comisionado europeo para la economía.
“Después de un primer semestre sorprendentemente sólido, la economía de la UE perdió ímpetu en el tercer trimestre y los datos de un sondeo reciente señalan una contracción para el invierno”, dijo a la prensa en Bruselas. “El panorama para el próximo año se ha debilitado significativamente”.
Es probable que el país más afectado el año que entra sea Alemania, la economía más grande de Europa y uno de los más dependientes del gas natural ruso antes de la guerra en Ucrania. Se anticipa que la producción de Alemania se encoja en 0.6% el próximo año.