(ESPECIAL)
Cerrar su restaurante de hamburguesas fue la gota que derramó el vaso para que Violeta Isfel cayera en depresión, pero asegura que ahora que está muy bien desea apoyar a las personas que pasan por situaciones similares a la de ella.
"Fue un cúmulo de cosas, había que tomar la decisión de cerrar o continuar y llenarlo de deudas, pero la terapeuta me explicó que fueron muchas cosas. Cuando vino la pandemia me fui al extremo y me llené de trabajo, que está bien, pero no en exceso, porque por más que quise no podía cumplir con todo", comenta Isfel en una entrevista para un medio nacional.
La actriz dice que el negocio que abrió hace un año, Isfel Burgers, no logró superar los tiempos difíciles que dejó la pandemia debido a que las ventas bajaron y las rentas de los locales subieron mucho, lo que la afectó emocionalmente. Además, afectó su plan de tener un bebé.
"Mi esposo y yo estábamos buscando ser papás con un tratamiento de pastillas, pero pues ese tipo de estímulos movieron cosas con mis hormonas", explica Isfel, quien señala que por el momento prefiere hacer ese tema de lado y concentrarse en salir de su depresión.
Como parte de su terapia, ahora quiere apoyar a otras personas que padecen este problema y lo enfrentan solos.
"Me di cuenta que uno siente pena y vergüenza de decir que está deprimido, descubrí que eso es una máscara para no enfrentar la situación y por eso me armé de valor y dije: 'hay que hablarlo y así yo puedo ser la red de apoyo de alguien que no tiene a nadie'", explica la actriz, quien comparte mensajes de apoyo en Instagram con sus seguidores.
Violeta, quien se apoyó en su hijo Omar y su esposo Raúl Bernal para superar la situación, indica que esto fue una piedra en el camino que superó y que le dejó más experiencia, para que en un futuro continúe con su restaurante y demás proyectos.
