(ESPECIAL)
El paso del tiempo y la idea de ser innovadores, han llevado a varios productores de cine a aventurarse a realizar adaptaciones en ‘acción real’ de diversas series de anime y manga.
Aunque en muchas ocasiones lo único que se ha conseguido es fracasar al intentar darle otra imagen a esas historias que gozan de gran fama entre los fans del anime, existen sus excepciones, las cuales han dejado más que satisfecho al público.
El más reciente ejemplo de que es posible encarnar a los personajes animados en actores de carne y hueso es One Pice, serie producida por Netflix basada en la famosa historia de Eiichiro Oda.
A sólo dos semanas de su estreno en la plataforma de streaming, el ‘live action’ de One Piece ya le ha quitado el trono a series de renombre como Stranger Things y Merlina.
La adaptación de las aventuras de ‘Luffy’ y compañía, junto al reparto de actores y los efectos de la producción, supieron conquistar al público a tal grado de que ya se confirmó una segunda temporada.
Aquí te vamos a presentar otras adaptaciones de anime a la ‘acción real’ que también han tenido un buen recibimiento por parte de los fans.
Gantz
Basada en la obra del mismo nombre del mangaka Hiroya Oku, llega este ‘live action’ estrenado en 2010 con su primera parte.
Gantz nos cuenta la historia de Kei Kurono, un estudiante común y corriente que luego de reencontrarse con su mejor amigo de la infancia, Masaru Kato, ambos terminan atropellados por un tren al intentar salvar a un hombre.
Sin embargo, luego del accidente los dos chicos despiertan en una habitación donde se encuentran más personas y una enorme esfera negra, la cual les da órdenes de matar a alienígenas.
La adaptación ‘live action’ a cargo de Shinsuke Sato y Yusuke Watanabe, supo adaptar muy bien uno de los primeros arcos de esta historia de ciencia ficción, obteniendo muy buenos resultados con los efectos de producción utilizados, así como los actores que dieron vida a los protagonistas.
Samurai X: El origen
Aunque la historia de Rurouni Kenshin ya ha recibido varias adaptaciones al ‘live action’, fue la producción del 2021 una de las que más ha convencido.
Nuevamente Netflix se aventuró a llevar a la acción real una de las series más queridas y famosos en el genero ‘Shonen’ del anime, obteniendo como resultado una gran obra que nos transporta al Japón feudal
Samurai X: El origen sirve como parte final de la saga de películas que adaptan la historia del anime, funcionando además como una precuela que explica un poco más sobre su protagonista, Himura Kenshin, conocido también como ‘Hitoriki Battosai’.
Midori, la niña de las camelias
Una de las obras más infames jamás creadas en la historia de la animación japonesa, llegó hace unos años a la acción real gracias al director Torico.
Aunque menos grotesca que su manga creado por Suehiro Marou y anime, adaptado por Hiroshi Harada, la versión ‘live action’ consiguió transmitir ese sentimiento de incomodidad que provoca la obra original a través de los peculiares y grotescos personajes que rodean a una inocente y desamparada niña, Midori.
La cinta fue lanzada en el año 2016 y a pesar de contar con algunas diferencias a la obra original, logró una buena estética en los personajes y su guion, regalándonos un final que de igual manera, es bastante desolador.
Death Note
Una de las obras del anime y manga más famosas en el mundo, ha recibido varias adaptaciones y, aunque la producción de Netflix de 2017 dejó bastante qué desear, su primera versión japonesa y la serie producida en Corea del Sur convencieron bastante.
Death Note goza de tener una de las historias más sencillas pero al mismo tiempo más interesantes en el mundo de la animación japonesa, por lo que no podía faltar el interés por llevarla a la acción real.
Tras ver varios intentos por darle vida a Death Note en un 'live action', queda claro que la clave está en los personajes, su esencia y todos esos rebuscados intentos de los protagonistas por no caer en sus propias trampas.
lamentablemente Netflix no pudo llegar al nivel de las productoras asiáticas y en 2017 entregó uno de los posibles peores 'live actions' que han existido.