Marisol Rosso realizó ayer una visita a Casa Feliz, en la ciudad de Torreón, donde son apoyadas familias de niños con cáncer originarias de Durango y otras entidades del país. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Marisol Rosso, presidenta honoraria del DIF estatal Durango, visitó Casa Feliz en Torreón a fin de conocer el trabajo que se realiza, sobre todo por los menores duranguenses.
Para darle la bienvenida se colocó una lona en la puerta principal de Casa Feliz en la que se leía: "Ningún Niño de Durango sin Medicamento".
Madres de familia de municipios de Durango como Gómez Palacio, Mapimí, Lerdo y de la propia capital, expusieron una serie de complicaciones que han enfrentado junto con sus pequeños hijos. Entre los obstáculos que expusieron a Rosso está ser ignorados por el DIF municipal, no contar con el apoyo para cubrir los gastos de sus traslados y falta de medicamentos.
"Así como personas de Gómez Palacio y de Durango, no hemos sido arropados por nuestro estado, hemos estado en un desierto y aquí es un oasis... hemos sido cobijados, estamos muy agradecidos", dijo una de las madres de familia atendidas en Casa Feliz.
Cecilia Marroquín de Murra, presidenta de la fundación Encendamos una Luz y quien se encarga de la operación de Casa Feliz, les dio una explicación y un recorrido por cada rincón de las instalaciones, de las que dijo son como "una segunda familia" para estas personas que atraviesan por una difícil situación.
Además, comentó que no solo se les ha brindado un espacio donde esperar a que sus pequeños reciban el tratamiento necesario para enfrentar su enfermedad, sino también para mejorar su calidad de vida, pues compartió que a uno de los pequeños no solo se le regaló un colchón, también una recámara completa para que pudiera descansar en su casa.
Al final la presidenta del DIF se comprometió a apoyar a las familias que se trasladan de otros municipios de Durango a Torreón para recibir su tratamiento a la Clínica 71 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
"Lo que tengamos que hacer para que nuestras niñas y nuestros niños puedan acudir tanto a su tratamiento en Torreón, que tengan las oportunidades de poderse trasladar, de poder estar con sus familias, porque sabemos que muchos dejan sus familias, que tengamos esa comunicación, esa cercanía… lo vamos hacer con todo el gusto y toda la responsabilidad del mundo tanto en Gómez Palacio como en Lerdo. Le agradecemos a Casa Feliz por acoger a nuestros niños, porque esto es lo más bonito, que estén rompiendo las fronteras, que no importe si eres de Durango, aquí todos somos uno", compartió Rosso.