Columnas Deportes Columnas Deportes Editorial

AL LARGUERO

Al Larguero

ALEJANDRO TOVAR

LOS RECUERDOS DEL PORVENIR

Con agradecimiento para el Dr. Ramiro Silva

Elena Garro (1916-1998) fue esposa de Octavio Paz y una novelista de sentido exquisito, propio de una mujer inteligente y creativa. Escribió en los sesenta "Los recuerdos del porvenir", que en 1968, Arturo Ripstein, alumno de Luis Buñuel, llevó a la pantalla con un notable éxito. Es un tema revolucionario, pero predominantemente femenino, porque los militares se adueñan del poblado y someten a las damas, que se sublevan y dominan con instinto, valentía y coraje, con el papel de Susana Dosamantes (1948-2022) como Julia Andrade, en ese tiempo joven y bella.  

La historia no condena a los soldados violadores, ni marca la postura valerosa de las mujeres y la comparación viene porque nos sucede algo similar a nosotros. Todos vemos el trote de Juan Brunetta y Harold Preciado, como finos corceles tipo Antares, Rigel, Altair y Aldebarán, los caballos de Juda en la famosa película Ben Hur, y sabemos de sobra que tienen el empaque para trotar en las canchas de Europa o ser cobijados en México por otros colores.

Las ideas de Elena Garro nos quedan justas. Sabemos por historia que el plan santista ya no radica en el éxito deportivo, ni parece importarles mucho si la gente puede tener una Navidad de alegría y amor. Ellos piensan en los precios de ambas joyas y en escoger al mejor postor. Como antes hicieron con Benítez, Oribe, Furch, Angulo, Ronaldo, Cabecita, Uriel, Arteaga, Jorge Sánchez, el chileno Valdés y Gorriarán y los que siguen. El futbol es una máquina, el negocio y el dinero. ¿Lo que dice el presidente Elizalde de que no serán vendidos, lo podrá creer alguien?

Son esas voces santistas, como la de voceros de un idealismo difícil de considerar cierto, porque el pueblo sabe que el fin del grupo es económico y que el presente taciturno solo conduce por caminos de engaño, derrota y melancolía y eso que hablar del sentido del tiempo es la aspiración suprema pero las cartas de la vida pasada nos muestran otras realidades y palabras que vuelan. 

El pobre Repetto paga su noviciado en México y mucho por la falta de asesores locales al preferir a sus amigos y paisanos. Hoy, Santos y su técnico son elementos con bipolaridad, definida como "Episodios recurrentes que van desde la manía o hipomanía (alegría, euforia, exaltación) hasta la depresión, tristeza e inhibición, que influyen en el comportamiento social, familiar, sentimental y laboral, que precisan de fármacos o intervención psicológica".   

Santos combina recepción de goles y derrotas con otras actuaciones donde Harold, Brunetta y Carlitos se lucen, pero los conocedores saben bien que eso es una gran irregularidad y que al cerrar en visita a Rayados y San Luis no se puede esperar mucho, por lo tanto Elizalde, Repetto y compañía deberán estar ya comprando veladoras y misales para orar por la ayuda divina. Santos es décimo con seis triunfos, dos empates y siete derrotas. Ha marcado 29 goles y recibido 31 para 20 unidades. Claro, brillan Brunetta con sus ocho tantos y Harold con sus once. Se han cotizado. 

El futbol también es bipolar, porque da felicidad y dolor. Es una máquina que produce sueños y lágrimas, dudas y certezas, es alimento del alma de la gente, que también huele lo que va a suceder. Porque en su encuentro con sombras ajenas ahora su imaginación se comunica con una mirada. Unos intentan fabricar una ficción y otros, el pueblo, luchan por aumentar ilusiones y pasiones.    

Alejandro Tovar

[email protected]

Leer más de Columnas Deportes

Escrito en: Al Larguero

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Columnas Deportes

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 2247764

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx