Las empresas exportadoras han sido las más afectadas por la apreciación del peso frente al dólar, informó la Canacintra. (ARCHIVO)
La apreciación del peso ha resultado perjudicial para el sector exportador, que se ha visto obligado a renegociar contratos con clientes de Estados Unidos y prevén consecuencias graves en caso de continuar la misma tendencia este año.
Para el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) Torreón, Alejandro Gutiérrez Gutiérrez, las empresas del ramo automotriz, agroindustrial y de alimentos son las que han resentido mayores afectaciones, pues su economía está sustentada en la exportación de productos.
Refirió que, para ajustar precios, los industriales que se dedican a dichas actividades han tenido que renegociar contratos, lo que, sin embargo, es molesto para los clientes con quienes ya existían acuerdos previos sobre determinados costos de los productos e insumos que reciben de las empresas mexicanas.
Además, la competitividad de dichas empresas disminuye en comparación con el resto del mundo, ya que, al cobrar más dólares a sus clientes para intentar soportar los elevados gastos en pesos, se ubican en situación de desventaja con las industrias de otros países, que podrían resultar más atractivas para los compradores.
El sector agroindustrial también ha resentido los efectos perjudiciales del "súper peso", específicamente a quienes se dedican a la exportación de alimentos, lo que repercute directamente a los fabricantes de implementos agrícolas.
En la medida en que la tendencia a la baja del peso con relación al dólar se mantenga, las empresas exportadoras tendrán que seguir ajustando precios.