El Banco de Inglaterra ha anunciado este jueves una nueva subida de 0.5 puntos porcentuales de los tipos de interés, que pasan del 3.5 % al 4 %, su nivel más alto desde 2008, como parte de su plan para contrarrestar la inflación en el Reino Unido.
Como habían previsto los analistas, el comité de política monetaria de esa institución votó a favor de aplicar este nuevo aumento, el décimo consecutivo que decide la entidad.
El anuncio se conoce en un contexto de elevada inflación, después de que cerrara diciembre en el 10.5 %, dos décimas menos que en noviembre.
Los tipos de interés del país se sitúan ahora en su nivel más elevado desde octubre de 2008, cuando el banco central inglés había comenzado a recortarlos como respuesta a la crisis financiera.
En su reunión, siete miembros del comité de política monetaria (MPC) de la institución abogaron por incrementar los tipos frente a dos que se mostraron partidarios de mantenerlos invariables.
"Mirando hacia adelante, el MPC ajustará los tipos como algo necesario a fin de devolver la inflación al objetivo del 2 % de manera sostenible en el medio plazo", señalaron los miembros del comité en un informe difundido hoy.
El Banco de Inglaterra ha vaticinado una recesión de cinco trimestres consecutivos, que comenzará en los primeros tres meses de 2023.
Según sus previsiones, que suavizan las proyecciones ofrecidas anteriormente por el organismo, el Producto Interior Bruto nacional (PIB) caerá un 0.25 % este año y en un 0.25 % en 2024, antes de remontar a casi el 1 % para 2025.
El comité indicó que la perspectiva para el mercado laboral también ha mejorado y cree que la tasa de paro subirá al 5.25 %, por debajo del 6.5 % previamente estimado.
Tras conocer estos datos, el ministro británico de Economía, Jeremy Hunt, indicó que desde el Gobierno apoyan "las acciones adoptadas hoy por el Banco de Inglaterra para conseguir bajar la inflación este año".
"Nosotros desempeñaremos nuestro papel asegurándonos de que las decisiones del Gobierno van en línea con el planteamiento del banco, resistiendo el impulso de ahora mismo de financiar gasto adicional o de recortar impuestos mediante el endeudamiento, lo que solo añadiría gasolina al fuego de la inflación y prolongaría el dolor para todos", aseguró.