(ESPECIAL)
Bank of America (BofA) mejoró su perspectiva para la economía mexicana en 2023, desde una caída de 0.5% a un crecimiento de 0.3%, pero alertó de la prevalencia del contagio por una posible recesión en Estados Unidos. La mejor expectativa sobre el desempeño del Producto Interno Bruto (PIB) nacional es consecuencia del buen cierre que mostró en 2022, de acuerdo con el banco estadounidense.
"Los ciclos económicos en Estados Unidos y México están altamente correlacionados, especialmente durante las recesiones. Todavía esperamos una desaceleración en México, pero ahora creemos que se retrasará, siguiendo nuestras nuevas expectativas en Estados Unidos". Explicó que la desaceleración en México será más visible a través de las remesas y el comercio exterior, pues en la medida que aumente el desempleo en la Unión Americana, se enviará menos dinero a las familias dependientes de los ingresos de los trabajadores mexicanos del otro lado de la frontera.
Estimó también un crecimiento de 0.6% en 2024, en el entorno de elecciones presidenciales, con lo que el potencial económico del país se mantiene muy por debajo de su rango previo a la pandemia de Covid-19. "Nuestras previsiones de crecimiento del PIB ya incorporan el ciclo electoral, ya que México tiene elecciones presidenciales a mediados de 2024. El nivel del PIB de México está lejos de su tendencia previa a la pandemia y lo vemos moviéndose alrededor de su nivel previo a la pandemia en los siguientes trimestres", dijo.
En el caso de Estados Unidos, la firma financiera espera un crecimiento de 0.7% durante 2023, una mejora en su perspectiva desde el estimado anterior de una caída de 0.4%. Para 2024, proyecta un crecimiento de 0.3% desde un avance de 0.9% previsto anteriormente.
"También esperan que venga con un pico de desempleo más bajo. La causa de la recesión retrasada es el gasto de los consumidores, que ha sido más fuerte de lo previsto", argumentó. En días pasados, BofA destacó el desempeño del peso mexicano, que en los próximos meses podría empezar a debilitarse, pero manteniéndose entre las divisas con mejor comportamiento.
"Creemos que va a seguir siendo de las mejores monedas en el mundo; el año pasado vimos que el dólar se fortaleció porque la Reserva Federal (Fed) estaba subiendo tasas y ahora está a debilitarse", explicó.
Hasta el momento, las perspectivas sobre el desempeño de la economía mexicana se mantienen sobre el desempeño de las remesas, cuya expectativa es que sigan con un buen comportamiento.
