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El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció planes para visitar la frontera común con México, previo a la cumbre programada para la siguiente semana en Ciudad de México con sus homólogos Justin Trudeau, de Canadá, y Andrés Manuel López Obrador, respectivamente.
De concretarse la visita, será la primera a la región por parte del mandatario estadounidense desde que asumió el cargo en la Casa Blanca.
Durante un viaje al estado de Kentucky, Biden manifestó que es su intención y subrayó que "estamos concretando los detalles".
El presidente estadounidense dijo que espera ver lo que ocurre en la frontera común con México; también tiene previsto realizar declaraciones sobre la seguridad en la franja sur de Estados Unidos.
Sin embargo, no quedó claro a qué punto de la frontera irá.
Se tiene previsto que el tema de la migración sea abordado de forma bilateral entre los presidentes Joe Biden y López Obrador, junto con otros de la agenda como son la seguridad y el combate al narcotráfico.
La frontera sur de Estados Unidos ha registrado un aumento masivo de migrantes, incluso a pesar de que Washington mantuvo en vigor el Título 42, una ley de salud pública que permite a las autoridades estadounidenses expulsar de manera inmediata a miles de indocumentados sin permitirles solicitar asilo.
El gobierno de Biden aún no ha presentado ningún cambio sistémico para gestionar la previsible oleada de inmigrantes en caso de que finalicen las restricciones.
Los líderes republicanos han criticado al presidente por políticas que, según dicen, son ineficaces en materia de seguridad fronteriza, y han cuestionado por qué no ha viajado aún a la frontera.
Por su parte, el titular del departamento de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, reconoció que el número de encuentros de migrantes está "tensando nuestro sistema", pero aseguró que su departamento está manejando la situación.
Activistas de derechos humanos critican la vigencia de la medida, que entre otras cosas permite la expulsión inmediata sin recurso legal.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) registró el pasado año fiscal, que concluyó el 30 de septiembre, un récord de 2.4 millones de arrestos de indocumentados en la frontera sur.
Cabe recalcar que en el Congreso de Estados Unidos un proyecto de ley de migración bipartidista fue descartado poco antes de que los republicanos asumieran el control de la Cámara de Representantes.
En contraparte, durante la presidencia de Donald Trump, el exmandatario visitó el lado estadounidense de la frontera en varias ocasiones, incluida una a McAllen, Texas, donde afirmó que México pagaría por el muro fronterizo.
