(JOSÉ DÍAZ / EL SIGLO DE TORREÓN)
Al cierre de 2022 el costo de la canasta básica en México se ubicó en dos mil 124.70 pesos en el área urbana, con este resultado se registró un aumento de 11.7% en su comparación anual con 2021 cuando su precio era de mil 901.66 pesos, quedando por encima de la inflación general en el país que cerró en 7.82%, así lo muestra un estudio realizado por SigloDATA de El Siglo de Torreón, elaborado con los datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
De acuerdo con el Consejo, se considera pobreza “… cuando no tiene garantizado el ejercicio de al menos uno de sus derechos para el desarrollo social, y sus ingresos son insuficientes para adquirir los bienes y servicios que requiere para satisfacer sus necesidades” (CONEVAL, 2018). Bajo esta conceptualización el Coneval define si la población se encuentra en pobreza o pobreza extrema y lo separa por el lugar de residencia, ya se urbano o rural.
En México y las economías más importantes del mundo se han observado un alto nivel de inflación, el cual es provocado, principalmente, por el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania que elevó abruptamente el valor de diferentes materias primas que se producen en los campos ucranianos. A nivel nacional, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) terminó el año en 7.82%.
México, así como la mayoría de las economías importantes en el orbe, ha mostrado altos niveles de inflación provocados, principalmente, por la guerra entre Rusia y Ucrania que disparó el valor de diferentes granos y alimentos producidos en los campos ucranianos; sin embargo, la inflación anual se ubicó en 7.82 por ciento en diciembre, de acuerdo con el Inegi.
El Coneval señala que el precio de la canasta básica en la zona rural paso de los mil 463.43 pesos reportados en diciembre de 2021 a mil 630.95 del mismo mes de 2022, por lo cual se observa un incremento de 11.4% que igual superó la inflación general nacional.
Para ambos sectores, los productos que más afectaron al precio anual de la canasta alimentaria fueron los alimentos y bebidas que se consumen fuera del hogar, le Consejo subrayó que la presión fue mayor para el sector urbano; en segundo lugar la tortilla de maíz fue el alimento que más incidió en la canasta de la zona rural, mientras que para las ciudades fue la leche pasteurizada de vaca; en tercer lugar se ubicó el huevo de gallina en el área rural y los alimentos preparados en el sector urbano.
Las familias mexicanas que consumen huevo ahora tendrán que desembolsar una mayor cantidad de dinero para mantener este alimento dentro de su dieta, asimismo se tendrá que pagar un poco más para adquirir tortillas, ya que este producto se encareció 16.5% de manera anual, de igual manera el pollo subió su precio un 19.7%.