Ambos países coincidieron en la necesidad de 'continuar con los esfuerzos conjuntos'. (ARCHIVO)
La Casa Blanca explicó este martes que la delegación estadounidense que se reunió con el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, se comprometió a frenar el tráfico de armas hacia el país latinoamericano, además de perseguir el fentanilo.
Elizabeth Sherwood-Randall, una de las asesoras de Seguridad Nacional del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, hizo el lunes su cuarta visita oficial a México para reunirse con López Obrador y la plana mayor del Gobierno mexicano para tratar el tráfico de fentanilo y la crisis migratoria en la frontera.
Ambos países coincidieron en la necesidad de "continuar con los esfuerzos conjuntos" para "combatir a los narcotraficantes, interrumpir el suministro de productos químicos utilizados para fabricar fentanilo y prevenir el tráfico de esta droga mortal", informó la Casa Blanca en un comunicado.
Además, Estados Unidos y México reconocieron que "localizar, frenar y desmantelar las redes de tráfico de armas de fuego es fundamental" para combatir el narcotráfico.
"Estamos comprometidos en abordar el tráfico de armas de fuego que contribuye a la violencia en ambos lados de nuestra frontera", afirmó a la oficina presidencial estadounidense.
En cuanto a la crisis migratoria, ambos países acordaron "ampliar aún más la disponibilidad de vías legales" para los migrantes en la región e impulsar de forma conjunta "el desarrollo" de Centroamérica, pero también mantener las fuertes restricciones contra los cruces irregulares en la frontera.
Tras el encuentro, el mismo López Obrador dijo en redes sociales que fue una reunión "muy productiva".
"Tratamos el tema migratorio con enfoque de respeto a los derechos humanos y de cooperación para el desarrollo de los pueblos, así como el combate al tráfico de fentanilo y de armas", expresó el presidente mexicano.
Las tensiones entre México y Estados Unidos por asuntos migratorios, de seguridad y de tráfico de drogas y armas se han extendido durante los últimos meses, hasta el punto de que fueron uno de los principales temas que López Obrador y Biden abordaron en la Cumbre de Líderes de América del Norte celebrada en la capital mexicana el pasado enero.