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El combate al hambre y la búsqueda de la paz en Ucrania estarán entre los temas que el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, discutirá en una audiencia con el papa Francisco y luego en París con su homólogo francés, Emmanuel Macron.
Lula llegará este martes a Roma, en el inicio de un viaje que le llevará también a París, donde asistirá a la "Cumbre por un nuevo pacto financiero mundial", convocada por el presidente francés.
La directora del Departamento de Europa de la cancillería brasileña, María Luisa Escorel, explicó en una rueda de prensa que la agenda oficial de Lula en Roma comenzará el miércoles, cuando será recibido por el presidente italiano, Sergio Mattarella.
En ese primer compromiso, será discutida la "intensa relación" bilateral y también el estado de las negociaciones para un acuerdo comercial entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur, del cual Italia es un "gran entusiasta", indicó la diplomática.
Lula se trasladará luego a El Vaticano, donde el mismo miércoles será recibido por el papa Francisco, con quien, según Escorel, tiene "mucha convergencia de ideas en relación a los asuntos sociales y medioambientales, sobre el combate al hambre y la defensa de los derechos humanos".
Asimismo, el presidente brasileño le planteará al obispo de Roma sus iniciativas para la búsqueda de la paz en Ucrania, hasta ahora no muy recibidas por las potencias occidentales y que apuntan a la creación de un grupo de países que pueda ejercer una mediación y llevar a Kiev y a Moscú a una mesa de negociaciones.
Tras la visita al papa, Lula se entrevistará con el alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, un antiguo amigo que incluso lo visitó en 2018, cuando el actual mandatario brasileño estaba preso debido a unos juicios por corrupción luego anulados por la Justicia.
El miércoles, Lula se trasladará a París, donde ese mismo día tendrá una reunión bilateral con el presidente de Suráfrica, Cyril Ramaphosa, y con organizadores de la próxima Cumbre Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28), que será celebrada a fines de este año en Emiratos Árabes Unidos.
Al día siguiente se unirá a los trabajos de la cumbre convocada por Macron, que intentará allanar el camino hacia un nuevo pacto financiero mundial que favorezca la cooperación, la lucha por el clima, restaure la confianza norte-sur y ayude a alcanzar los objetivos propuestos por las Naciones Unidas en la Agenda 2030.
El viernes, Lula tendrá un almuerzo privado con Macron, a quien, según dijo Escorel, le reiterará su invitación a participar en la cumbre amazónica que Brasil ha convocado para agosto próximo en la ciudad de Belém.
Asimismo, en la reunión con Macron, estarán sobre la mesa las negociaciones para el acuerdo UE-Mercosur y la iniciativa de Lula para la búsqueda de la paz en Ucrania, hasta ahora resistida por Francia y otras potencias occidentales.
En relación al acuerdo UE-Mercosur, el propio Lula anticipó este lunes que le reiterará a Macron el rechazo de su país a las nuevas exigencias ambientales que ha planteado el bloque comunitario.
