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El pasado 3 de febrero, unos 50 vagones se descarrilaron en East Palestine, Ohio, Estado Unidos, cerca de las 21:00 horas locales, cuando el tren llevaba productos de Madison, Illinois, a Conway, Pensilvania.
Algunos de los vagones llevaban sustancias químicas peligrosas. En particular, uno transportaba cloruro de vinilo. Para evitar el riesgo de explosión, las autoridades realizaron liberación y quema controlada de los gases, y ordenaron evacuar a lugareños en un radio de entre 1.5 y 3.2 kilómetros. ¿Por qué?
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Los investigadores federales afirman que un problema mecánico con el eje de un vagón causó el descarrilamientoEl cloruro de vinilo es un gas incoloro que se utiliza en una variedad de productos plásticos, incluyendo tuberías, revestimientos de alambres y cables, así como en materiales de embalaje.
Se trata de un gas incoloro, con un aroma suave y dulce. Se quema con facilidad y es inestable cuando hay altas temperaturas. Al quemarse, puede crear fosgeno, una sustancia altamente tóxica que fue utilizada como arma química en la Primera Guerra Mundial.
Se evapora fácilmente al entrar en contacto con agua o tierra. En el aire, el cloruro de vinilo se transforma en otras sustancias peligrosas.
De acuerdo con expertos, aquellas personas expuestas durante años a este gas presentan cambios en la estructura celular del hígado, el pulmón o el tejido conectivo.
También está ligado con diversos tipos de cánceres, principalmente el hepático, y puede originar lesión genética de carácter hereditario.
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Vagones tenían el riesgo de estallar y causar estragos en los alrededoresSíntomas de intoxicación por cloruro de vinilo. Una exposición de corta duración puede producir irritación en los ojos, mareos, somnolencia, desmayos, alteraciones en la inmunidad o incluso problemas de circulación de la sangre en las manos.
Cuando la piel queda expuesta a este gas, podrían presentarse enrojecimiento y ampollas.
Otros vagones trasladaban líquidos combustibles, acrilato de butilo y residuos de benceno. Muchas de estas sustancias pudieron haberse filtrado hacia cursos fluviales cercanos.
Sin embargo, la Agencia de Protección Ambiental (EPA por sus siglas en inglés) declaró que los marcadores de contaminación no arrojaban niveles preocupantes y pidió a la gente regresar a sus viviendas, lugareños han alertado sobre la muerte de animales, como peces, gallinas y zorros, que atribuyen a la expansión del gas.
