El pavimento de esta parte de la ciudad suele tener muchos baches debido a la circulación de vehículos de carga. (EDIE RUIZ)
Muchas partes de la Zona Industrial de Gómez Palacio se encuentran muy deterioradas en su carpeta asfáltica. Hace años en esta zona se realizaban labores de mantenimiento de las calles de forma conjunta entre la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas del Estado (Secope) y el Patronato de Obras y Servicios del Parque Industrial (OSPI).
Anteriormente era el Gobierno del Estado de Durango el que liberaba decenas de millones de pesos correspondientes a la devolución del Impuesto Sobre Nóminas (ISN), que aportan los empresarios.
La ultima vez que se informó públicamente de manera conjunta sobre las acciones de mejora a realizar en la Zona Industrial fue en 2019, año en el cual ya había señalamientos por parte de los empresarios de que no había sido atendida la petición de que fueran los mismos empresarios, y no el gobierno de Durango quienes se encarguen de administrar y ejecutar dichos recursos.
Con tierra. Varios de los baches de esta área han sido tapados de forma periódica incluso con tierra luego de las lluvias de septiembre y octubre pasados.
Carga pesada. El pavimento de esta parte de la ciudad suele tener muchos baches debido a la circulación de vehículos de carga.
Desde hace años. El pavimento de la Zona Industrial de Gómez Palacio tiene un severo deterioro que se arrastra desde hace años. Es común ver este tipo de daños.
Bacheo insuficiente. En la calzada Lázaro Cárdenas hay un deterioro muy evidente de la carpeta asfáltica y se notan reparaciones de hace mas de 4 años, por lo que en varios tramos es insuficiente ya solo el bacheo.
Olvidado. En algunas zonas se ha cortado el concreto para hacer reparaciones o instalar infraestructura que requiere este sector pero han pasado semanas o meses en varios casos y no se ha colocado de nuevo el concreto.
Profundos. Algunos de los hoyos se han ido haciendo cada vez mas profundos, por lo que son motivo de quejas de los conductores locales.
