Las autoridades ordenaron más tarde la evacuación del área cercana a medida que crecían los temores sobre una posible explosión. (AP)
Columnas de humo, preguntas sobre animales muertos, preocupaciones sobre el agua potable. El descarrilamiento de un tren en Ohio, Estados Unidos, y la posterior quema de algunos de los productos químicos peligrosos que transportaba hace que la gente se pregunte: ¿Qué tan preocupada debería estar?
Ha pasado más de una semana desde que 50 de los 150 vagones de un tren de carga se descarrilaron a las afueras de East Palestine, cerca del límite del estado de Pennsylvania, al parecer por un problema mecánico con el eje de un vagón, el 3 de febrero.
Nadie resultó herido, pero las preocupaciones sobre la calidad del aire y los productos químicos peligrosos a bordo del tren hicieron que algunos residentes se fueran, y las autoridades ordenaron más tarde la evacuación del área cercana a medida que crecían los temores sobre una posible explosión. Los funcionarios optaron por liberar y quemar intencionalmente el cloruro de vinilo tóxico de cinco vagones de ferrocarril, lo que provocó que las llamas y el humo negro se elevaran nuevamente hacia el cielo.
Los funcionarios ambientales dicen que los monitores detectaron toxinas en el aire en el sitio durante la quema controlada y que los funcionarios mantuvieron alejadas a las personas hasta que se disiparon. Indican que el monitoreo continuo del aire realizado por la firma ferroviaria y agencias gubernamentales no ha detectado niveles peligrosos en el área, incluso durante pruebas dentro de casi 400 hogares, desde que se permitió que los residentes regresaran.
El riesgo para los animales es bajo, dijo el Departamento de Agricultura de Ohio. Los contaminantes de vagones descarrilados se derramaron en algunas vías fluviales y fueron tóxicos para los peces, pero las autoridades afirmaron que el agua potable se mantuvo protegida.
El senador J. D. Vance dijo en Twitter que se trataba de un "complejo desastre medioambiental" que requeriría un estudio a largo plazo. En 2017, se revirtieron las normas que exigían actualizaciones del sistema de frenado para los trenes que transportan material peligroso, indicó el diario The New York Times.
Otra fuga. En Tucson, Arizona, un camión volcó en la carretera Interestatal 10, informaron medios de EU, con ácido nítrico. Tras la volcadura se liberó una nube que llevó a las autoridades a pedir a todas las personas en los alrededores buscar refugio. Según BNO News, varios lugares fueron evacuados.