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El beisbol como deporte y negocio

JUAN GARCÍA

Una de las frases favoritas de don Pedro "El Mago" Septién, aparentemente inventada por él y que citaba con frecuencia, dice acerca del beisbol que "es mucho deporte para ser negocio, y mucho negocio para ser deporte".

Esa sentencia tiene un claro sentido, pero puede tener varias interpretaciones. Una de ellas es que el beisbol, en especial el que se práctica de manera profesional, incluye aspectos que van más allá de los estrictamente deportivos.

Como pueden ser los relativos al número de aficionados que asisten a presenciar los juegos de pelota como entretenimiento o espectáculo, así como la duración de los encuentros. Porque estos son dos puntos importantes de los que no se habla ni escribe, o se escribe o habla muy poco.

Pues bien, durante la primera parte de la actual temporada de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB), 26 juegos tuvieron como escenario el estadio de la Revolución. De acuerdo a las cifras que se reportan a la LMB, estos juegos registraron una asistencia total de 154,321 personas, con un promedio de asistencia por juego de 5,935 aficionados. Esta cifra equivale al 72 por ciento del cupo del parque, que oficialmente es de 7,689 asientos. Aparentemente la información que se proporciona incluye a la totalidad de los abonados, asistan o no a los juegos.

En la temporada del año pasado, 2022, el promedio de asistentes por juego durante la primera parte de la campaña fue de 4,291 personas. Lo cual significa que el promedio aumentó en poco más de 1,600 asistentes, que no está mal.

Por días de la semana, los viernes son los que mayor asistencia registran (6,273 en promedio) y le siguen los sábados, martes, miércoles, jueves y domingo, en ese orden de más o menos, si bien las diferencias entre un día y los demás son relativamente pequeñas.

La duración promedio de los 26 juegos fue exactamente de 3 horas, promedio que incluye la duración de dos juegos que se fueron a extrainnings, a saber: el del 7 de mayo frente a Saraperos de Saltillo que comprendió 11 episodios y tuvo duración de 3 horas 31 minutos, y el del 11 de junio, también de 11 episodios, ante Generales de Durango con duración de 3 horas 40 minutos.

La duración promedio de los juegos efectuados durante la primera parte de la temporada regular de 2022, sin considerar los que fueron a 7 entradas, por no ser datos comparables, fue de 3 horas 36 minutos. De donde se desprende que las medidas aplicadas a partir de 2023 para agilizarlos han hecho disminuir la duración promedio en 36 minutos, tiempo que aun es posible reducir más si se pone límite al tiempo de que disponen los pitchers para hacer sus lanzamientos cuando tienen corredores en base.

El juego de menor tiempo fue el del 9 de junio contra Generales de Durango que duró 2 horas 22 minutos, y el que mayor tiempo consumió, de 9 entradas, fue el del 17 de mayo ante Sultanes de Monterrey, que duró 3 horas 59 minutos.

Queda claro pues que el beisbol es mucho deporte para ser negocio, y mucho negocio para ser deporte, pues como espectáculo, en los tiempos que corren, si los juegos se desarrollan con mayor agilidad, a los aficionados les resultan más atractivos y de mayor entretenimiento. Lo cual a su vez es probable que atraiga más espectadores.

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