Los laguneros respondieron al llamado ciudadano y acudieron a la Plaza Mayor. (ARCHIVO)
En respuesta a la convocatoria para rechazar el Plan B electoral, laguneros se concentraron en la Plaza Mayor de Torreón, donde además se levantan firmas para promover recursos de inconstitucionalidad ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación contra dichas modificaciones. Esta marcha se sumó a miles en todo el país.
Los laguneros respondieron al llamado ciudadano y acudieron a la Plaza Mayor, en una concentración que además sirvió para reunir miles de firmas que se harán llegar a la Suprema Corte de Justicia a través de Amigos de la Corte.
Poco a poco la Plaza Mayor se fue llenando de mujeres y hombres ataviados con playeras rosas o blancas en su mayoría, en señal de apoyo al Instituto Nacional Electoral y en defensa de la democracia.
Aunque inicialmente se dijo que los participantes de Gómez Palacio y Lerdo marcharían desde la réplica de la Torre Eiffel hacia el sitio de la concentración, los asistentes decidieron irse por su cuenta, al igual que un pequeño grupo de maestros que salió de la fuente del Pensador de la Alameda Zaragoza.
Una vez cubierta la plancha de este espacio público, los oradores comenzaron interpretando el Himno Nacional, que los asistentes corearon con entusiasmo para enseguida repetir la consigna de "Mi voto no se toca".
De manera simultánea, estas movilizaciones se dieron en 120 ciudades del país y otras naciones como Estados Unidos, Canadá, España, Francia, Israel, Suiza, República Checa, entre muchas más donde los residentes mexicanos se unieron a las protestas.
En Ciudad de México, ciudadanos y opositores pintaron el Zócalo de rosa y blanco para expresar que #MiVotoNoSeToca.
Sobre esta movilización, las discrepancias sobre las cifras se hicieron presente. Los organizadores calcularon la participación de más de 500 mil personas. En contraste, el Centro de Orientación Vial de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) estimó 90 mil.
Es la primera vez en este sexenio que una manifestación contraria al gobierno federal desborda el Zócalo capitalino, bastión del presidente Andrés Manuel López Obrador en infinidad de ocasiones.
Desde las 08:00 los asistentes comenzaron a llegar al acto programado para las 11:00. Acudieron algunos políticos, pero eran más los ciudadanos: niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad en una importante proporción.