Aunque hay bordos de abrevadero que lograron tener captaciones de más del 50 por ciento durante las últimas lluvias, el escenario no es del todo positivo. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Estiman que para el cierre de 2023, la muerte de ganado incluya unas 25 mil cabezas. Para 2024 la cifra dependerá de lo crudo de la temporada de frío durante los meses de diciembre, enero y febrero.
Rogelio Soto Ochoa, presidente de la Unión Ganadera Regional, reiteró que son alrededor de 400 mil las cabezas de ganado en riesgo en el estado de Durango "estamos hablando de la mitad del hato ganadero, sabiendo que tenemos un hato ganadero en vientres que fluctúa 900 y 950 mil vientres, poquito más de la mitad está en riesgo".
Explicó que si bien hay bordos de abrevadero que lograron tener captaciones de más del 50 por ciento durante las últimas lluvias, el escenario no es del todo positivo, debido a que la mayoría de estos espacios de captación requieren lluvias torrenciales para abastecerse al 100 por ciento.
De acuerdo al monitor de Sequía, que actualiza la Comisión Nacional del Agua (Conagua) hasta el 15 de noviembre, hay en Durango al menos ocho municipios (Canatlán, Durango, El Oro, Otáez, San Dimas, Santa Clara, Tepehuanes y Nuevo Ideal), con condiciones de sequía excepcional.
Canelas, Coneto de Comonfort, Guanaceví, Hidalgo, Indé, Mezquital, Ocampo, Pueblo Nuevo, Rodeo, San Bernardo y Topia, en el último corte presentan condiciones de sequía extrema, según el análisis de Conagua.
