Salud Coahuila señala que el principal reservorio es el perro. (ARCHIVO)
San Pedro de las Colonias es el municipio de la región Lagunera de Coahuila con la mayor incidencia de Rickettsia. De enero al 18 de agosto de 2023 y de acuerdo a datos oficiales de la Secretaría de Salud del estado, cuatro personas fueron diagnosticadas en este municipio con fiebre manchada y tres de ellas murieron. En total, se han estudiado 21 casos sospechosos.
En Torreón, el acumulado es de un caso positivo de fiebre manchada y una defunción; se han analizado 17 casos probables. Matamoros, Francisco I. Madero y Viesca se mantienen con saldo blanco.
En todo el estado, el reporte es de 20 casos confirmados de fiebre manchada y 12 víctimas mortales lo que representa una letalidad del 60 por ciento. Se han estudiado 243 casos sospechosos.
En Saltillo suman ocho casos positivos y cinco defunciones además de que se han analizado 97 casos probables. En Ramos Arizpe son cinco casos positivos y tres fallecimientos mientras que en Monclova se tiene registro de un caso al igual que en Arteaga.
Las autoridades de salud federales detallan que las rickettsias son transmitidas por vectores infectados como lo pueden ser ciertas especies de garrapatas, de pulga o de piojo; el modo de infección es por picadura o por contaminación de heridas localizadas en la piel o las mucosas con vectores aplastados o sus heces.
No existe transmisión directa de persona a persona y las garrapatas sirven como vector y como hospedero de varias especies de rickettsias, siendo una de las de mayor importancia clínica rickettsia rickettsii, agente etológico de la fiebre manchada de las Montañas Rocosas, transmitida por la garrapata, de la cual su principal reservorio es el perro. En 2022, la letalidad por Rickettsia en Coahuila fue del 69%; en 2021 del 60% y en 2020 del 50%.
En julio de este año, Humberto Gerardo Flores Muñoz, coordinador del Programa de Vigilancia Epidemiológica en la Jurisdicción Sanitaria No. 6 de La Laguna, dijo que en esta región y en todo el país, el 90% de los casos que se han presentado son por fiebre manchada. Destacó la importancia de que el personal de salud sepa que debe vigilar el periodo de incubación (14 días) en caso de que llegue una persona con datos clínicos inespecíficos y con el antecedente de la picadura de una garrapata o de vivir un lugar con garrapatas.
