(TWITTER)
Un estudiante surcoreano se comió una banana que formaba parte de una instalación del artista italiano Maurizio Cattelan, asegurando que "tenía hambre" porque no había desayunado.
La obra del artista italiano consistía en una banana madura que estaba adherida con cinta adhesiva a la pared del Museo de Arte Leeum, en Seúl.
Tras comerse la fruta, el alumno pegó su cáscara a la pared.
Sin embargo, el museo más tarde reemplazó la banana en el mismo sitio, de acuerdo con los medios locales.