Cultura Cultura COLUMNAS FIL Guadalajara

Javier Álvarez

Fallece el compositor mexicano Javier Álvarez y deja un legado a nivel cultural

En su repertorio destacan obras como Temazcal para maracas y cinta

(CORTESÍA)

(CORTESÍA)

SAÚL RODRÍGUEZ

Consideraba que la duda era el principal motor de la invención, que un buen maestro es quien enseña a otros a aprender, que el mundo no está inmediato, alrededor de uno mismo, sino más allá, y que el arte tiene la capacidad de crear mejores ciudadanos.

El compositor mexicano Javier Álvarez Fuentes falleció este miércoles a la edad de 67 años. Galardonado con el Premio Nacional de Ciencias y Artes (2013) y con la Medalla Bellas Artes (2015), se mostraba como una de las mentes musicales y creadoras más importantes de este país.

Alumno de reconocidos compositores como Mario Lavista y John Lambert, el maestro concedió en septiembre de 2019 una entrevista exclusiva a El Siglo de Torreón, esto durante la XV edición del Festival Visiones Sonoras que organiza el Centro Mexicano para la Música y las Artes Sonoras (CMMAS) en la ciudad de Morelia, Michoacán.

En esa ocasión, Javier Álvarez participó en una conferencia y reflexionó sobre su visión acerca del espacio, las herramientas digitales y la docencia. Este último papel fue de vital importancia para su carrera, pues en Mérida creó todo un legado al frente de la Escuela Superior de Artes de Yucatán (ESAY).

“Como maestro, uno de los ideales es dejar en la mente del alumno todas estas interrogantes. No certezas, sino interrogantes. Todas estas preguntas esenciales que se han hecho las personas y no las respuestas consabidas que tenemos. Porque enseñar está limitado por lo que tú y yo conocemos”.

Más que un compositor, se consideraba un inventor. En su repertorio destacan obras como Temazcal para maracas y cinta (1984), la cual compuso durante una estancia en Inglaterra. Esta se soporta en la acústica de las maracas y en un manto electrónico complejo donde manipuló registros de arpa, guitarra, pizzicato de contrabajo y tambores de bambú. Todo esto inspirado en la grabación de El Limoncito, un son tradicional que aparece al final de la pieza.

“Cuando yo compuse Temazcal... esa obra la compuse todavía utilizando cintas magnéticas y cortándolas con navaja de afeitar. La técnica era mucho más artesanal, por lo tanto más lenta, por lo tanto te forzaba a ser mucho más cuidadoso con el tiempo, que como era más lenta tenías que actuar más rápido y de alguna manera compensar. Entonces, hay mucha diferencia. No existía el tipo de bocinas que hoy tenemos, que son totalmente eficientes. No teníamos la facilidad de reproducir cosas tan rápidamente. Los aparatos estéreo en los que escuchábamos música, eran bastante pobres, de baja calidad, etcétera. No había las mismas herramientas”.

Así mismo, Javier Álvarez compuso la banda sonora para la película La invención de Cronos (1993) del cineasta mexicano Guillermo del Toro.

Gran colaborador

Uno de sus alumnos y gran amigo fue el compositor Rodrigo Sigal, fundador del CMMAS y del Festival Visiones Sonoras, quien desde Morelia atendió vía telefónica al Defensor de la Comunidad ante la noticia del deceso. Sigal compartió que el maestro Álvarez fue siempre un gran colaborador y que incluso curaría la edición 2024 de Visiones Sonoras.

“Perdemos a uno de los artistas, creadores, compositores, gestores y maestros más importantes de México, y no nada más desde mi experiencia directa con él, sino por su trayectoria de años y años de profesor, como director en el Conservatorio de las Rosas y ni se diga en la Escuela Superior de Artes de Yucatán”.

Respecto a su música, añadió que Javier Álvarez fue un fanático de los espacios, de la arquitectura, de la fotografía. Lo más impresionante de su repertorio musical radica en la vigencia de sus obras a través de 40 años, algo que sólo pocos compositores pueden lograr.

“Si tu quieres pensar en Papalotl (1992), en Temazcal, en Así el acero (1988), en obras fundamentales de su repertorio de hace 40 años a las obras de hoy, obras orquestales, a todo el ciclo de cuarteto de cuerdas, hasta Mejor morir en la selva (2017) son obras súper actuales, es increíble […] Realmente va a ser un hueco que va a ser imposible de llenar, pero también deja un legado fundamental, una lección de vida desde mi punto de vista”, concluyó Sigal.

Leer más de Cultura

Escrito en: Javier Álvarez

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Cultura

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

(CORTESÍA)

Clasificados

ID: 2198444

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx