(EFE)
Familiares de víctimas de desaparición forzada en el periodo conocido como Guerra Sucia en México marchó el domingo en la ciudad de Chilpancingo, capital del estado de Guerrero, sur de México, protesta que llevó al exterior de instalaciones militares en la conmemoración del Día del Ejército mexicano.
En México, la época conocida como "Guerra sucia" se dio en parte de la década de 1960, la de 1970 y parte de 1980 del siglo pasado y fue catalogada por especialistas como "terrorismo de Estado".
El malestar de los familiares de desaparecidos ha crecido porque, de acuerdo con lo que este día denunciaron "no existen avances en la supuesta investigación que puso en marcha el Gobierno de México para esclarecer estos hechos".
En Chilpancingo, en donde se llevó acabo la celebración oficial del Día del Ejército Mexicano por autoridades civiles y militares, los familiares marcharon por las principales calles, avenidas y por un tramo de la autopista con rumbo a Acapulco para llegar a las instalaciones del 50 Batallón de Infantería, en donde efectuaron una parada y siguieron su caminata.
La marcha fue acompañada con fotografías de las personas desaparecidas de maneras forzadas por el Ejército mexicano, como lo han reconocido las autoridades federales. Junto a los mensajes de justicia se leía decenas de nombres y apellidos de los ausentes.
En el comunicado leído con altavoz al exterior de las instalaciones militares, los familiares consideraron "crucial tener el acceso guiado a la justicia, sin simulaciones e impunidad" y exigieron "identificar, capturar y castigar a los militares y a pilotos de la Fuerza Aérea Mexicana que aún están vivos".
"Hoy denunciamos públicamente que las investigaciones de los hechos donde fueron desaparecidos forzadamente nuestros familiares no registran avances importantes porque el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Crescencio Sandoval, no permite el avance y protege a los militares criminales que aún viven, lo cual denunciamos y repudiamos públicamente", expresaron.
También denunciaron al titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, ya que dijeron no se han recibido a los familiares de desaparecidos y actualmente sólo dos agentes del Ministerio Público Federal los atienden.
Además, demandaron que la Comisión para el Acceso a la Verdad, dependiente de la Secretaría de Gobernación (Interior) se pongan a trabajar, que su presidente Alejandro Encinas emita los lineamientos para que funcione y que se detenga el maltrato y discriminación hacia las víctimas en Guerrero, así como la instalación de una oficina de esa Comisión en el municipio de Atoyac.
También solicitaron una reunión urgente con el presidente Andrés Manuel López Obrador y con el propio Encinas y advirtieron que de ser necesario se movilizarán al Zócalo de la Ciudad de México.
Durante el periodo de la llamada Guerra Sucia en Guerrero desaparecieron miles de personas señaladas como guerrilleros, principalmente de la sierra de Costa Grande.
La lucha de familiares y sobrevivientes durante décadas ha logrado que el Estado mexicano lo reconozca.
En julio del año pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador inició los trabajos de la Comisión para el Acceso a la Verdad, el Esclarecimiento Histórico y el Impulso a la Justicia de los hechos ocurridos entre 1965 y 1990.
Los trabajos incluyen la apertura de instalaciones militares y archivos en la ciudad de México y Guerrero. Posteriormente también se ordenó la apertura de archivos de la Secretaría de Marina.