Los hechos sucedieron luego de que la activista concluyera su labor en una exhumación en el vecino municipio de Gómez Palacio. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Luego de que se diera a conocer que Silvia Ortiz, representante de Grupo Vida, fuera agredida por elementos de la Policía Estatal en Torreón, la Fiscalía General del Estado (FGE) en Coahuila, informó que al momento está abierta la carpeta de indagación, donde ya se han identificado a los elementos dependientes de la Secretaría de Seguridad Pública.
“Recibimos la denuncia, de hecho mandamos personal a su domicilio para recibir la denuncia e integrar el expediente correspondiente, yo en lo personal ya tuve comunicación con ella al momento y estamos trabajando”, dijo el fiscal, Gerardo Márquez Guevara.
Indicó que además había otra persona afectada, la cual es una antropóloga forense.
“Son policías estatales y ya enviamos los oficios correspondientes, también tenemos unos videos que fueron generados por ellos mismos, además la identificación de las personas que realizaron ese evento”, dijo.
Informó que hasta el momento es el único caso denunciado, donde las madres de familiares desaparecidos han sido agredidas en los últimos meses.
HECHOS
Fue el pasado 19 de noviembre que el esposo de la activista lagunera Silvia Ortiz denunció que ella, su hijo y una antropóloga estadounidense fueron agredido por elementos de la Policía Especializada de Coahuila (PEC) en el retén del vado que conecta Gómez Palacio con Torreón.
De acuerdo a lo que relató en el retén los agentes detuvieron la camioneta y dado que el cristal de la camioneta del lado del conductor no bajaba, intentaron bajar a su hijo, ya que decían que "venía drogado".
Respecto al señalamiento, las autoridades informaron que Silvia Ortiz opuso resistencia, colocándose en la puerta para evitar que descendiera, impidiendo así el trabajo de los elementos, quienes estuvieron obligados a retirarla para realizar la inspección de rutina.
Trascendió que los policías localizaron una pipa y en la parte trasera de la unidad una bolsa negra que en su interior contenía envases de cerveza cerrados, señalando el propio oficial a Ortiz que en ambos casos no había motivo de detención; sin embargo, habían esposado al conductor por resistirse, terminando todos por retirarse del lugar.
Cabe señalar que estos hechos sucedieron luego de que la activista concluyera su labor en una exhumación en el vecino municipio de Gómez Palacio y se trasladaba a Torreón.
