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La ONG de derechos humanos Human Rights Watch (HRW) criticó este martes al Ministerio del Interior malasio por ordenar la confiscación de una colección de relojes decorados con el arcoíris LGBT en varias tiendas de la marca Swatch.
El subdirector de HRW en Asia, Phil Robertson, afirmó que la confiscación de los relojes se debe a la política de discriminación del Gobierno malasio contra el colectivo LGBT, lo que calificó de "violación flagrante de los derechos humanos".
Según informó el lunes el diario The Edge, la Policía requisó los relojes de la Colección Orgullo de Swatch los pasados 13 y 14 de mayo en distintas tiendas en Kuala Lumpur y otras ciudades malasias.
El consejero delegado del grupo británico, Nick Hayek, criticó la medida y afirmó que los relojes con el arcoíris son un símbolo de "paz y amor" que busca transmitir un mensaje de "alegría por la vida".
La compañía indicó que está tratando de que las autoridades devuelvan los relojes confiscados.
La ONG malasia Jejaka, que trabaja en favor de los derechos LGBT, puso en duda la legalidad de la confiscación realizada por la Policía y expresó su consternación por lo ocurrido.
"Las acciones tomadas contra la Colección Orgullo de Swatch revelan un nivel preocupante de intolerancia. No es un asunto de relojes coloridos; es sobre el respeto por la diversidad, la libertad de expresión y, lo más importante, amor", precisó Dhia Rezki Rohaizad, presidente de Jejaka, en un comunicado divulgado el lunes.
Cualquier tipo de expresión del colectivo LGBT es polémica en Malasia, donde más del 60 por ciento de sus 34 millones de habitantes son musulmanes, mientras que el resto profesa el budismo (19 por ciento), el cristianismo (9 por ciento) y el hinduismo (6 por ciento), entre otras religiones.
El pasado septiembre, la empresaria transgénero Nur Sajat, dueña de una marca de productos de cosmética, huyó de Malasia al ser acusada de violar la ley islámica y, tras ser retenida temporalmente en Tailandia, fue finalmente acogida en Australia.
Las películas "La bella y la bestia" (2017) y "Thor: Love and Thunder" (2022) fueron retiradas de Malasia por tener escenas con referencias al colectivo LGBT.
