(SERGIO A. RODRÍGUEZ)
Un extrabajador de una maquiladora ubicada en Frontera denunció que fue despedido de manera injustificada, después de ser diagnosticado con cáncer, al parecer por prolongadas exposiciones a radiación en la empresa en la que trabajaba.
Jorge Luis Pérez Soto, actualmente de 42 años de edad y con una hija de 10 años y otra de 5, perdió la vista por el tumor, pero también perdió el olfato, el gusto, parte de la capacidad auditiva de un oído y por complicaciones tiene problemas renales y requiere hemodiálisis tres veces por semana.
En rueda de prensa el ex trabajador de Joyson Safety Systems explicó que un día solicitó permiso para faltar a la empresa, pues tenía cita para consulta médica en Monterrey por problemas en su cabeza.
Tras análisis y exámenes, le detectaron un tumor en la zona frontal de la cabeza, dentro del cráneo, entre la meninge y el cerebro. El tejido anormal resultó ser cáncer.
Al regresar a su trabajo, explicó, ya no le permitieron ingresar, lo despidieron y le retiraron la seguridad social del IMSS y el seguro de gastos médicos mayores que tenía.
Afirmó que fue despedido por cumplir con su trabajo. Su cargo era Líder Nacional de EHS (Seguridad, Medio ambiente e higiene), y seguridad radiológica, y la empresa, que fabrica autopartes, tiene equipos especiales de rayos X para inspeccionar piezas de acero como parte de los controles de calidad.
Los equipos no son como los utilizados para fines médicos, la radiación ionizante es mucho mayor que la que emiten los aparatos de Rayos X de los hospitales, “no es lo mismo una radiografía para ver a través de músculos y tejido humano, que para ver a través del acero”, explicó.
Por su trabajo estuvo muchas veces expuesto a estas radiaciones sin que la industria le hubiera suministrado el equipo de seguridad personal que requería.
En diciembre le detectaron un tumor en la cabeza y fue operado de emergencia, agregó. En febrero se le realizó una segunda cirugía para retirarle todo el tejido canceroso, pero el daño a su cerebro no era reversible y perdió las capacidades para ver, oler y saborear, y de pérdida parcial del oído.
Dijo que por incumplimiento de las normas de seguridad para los trabajadores, él ordenaba suspender las labores de esos y otros equipos para que subsanaran los errores, pero el gerente del área de Módulos, Marcos de León; Margarito Lesa, Gerente Senior de Recursos Humanos; y Claudio Garza, de Recursos Humanos promovieron su salida.
Señaló que De León emprendió lo que llamó el entrevistado “una persecución de mi persona”, acosándolo laboralmente, y pese a que lo reportó la empresa nada hizo.
El 23 de agosto de 2023 se realizará la primera audiencia en el Tribunal Laboral del Distrito Judicial de Monclova, promovido por Pérez Soto contra Joyson Safety Systems por despido injustificado.
EMPRESA VIOLÓ LOS DERECHOS HUMANOS DEL EX EMPLEADO
El abogado del demandante, Armando Hernández Molina, de la firma Heram consultores jurídicos, expuso que no solo le violaron los derechos laborales a su representado. Sostuvo que le fueron violados sus derechos humanos.
Explicó que la empresa le hizo firmar acuerdos de confidencialidad para no revelar lo que ocurre en el interior de la industria. Actualmente hoy otras dos personas que laboran o laboraron en Joyson fueron diagnosticadas con cáncer, dijo.
Jorge Luis Pérez Soto agregó que en sus 17 años en la compañía tuvo conocimiento de nueve trabajadores que resultaron con cáncer.
Agregó que la industria sabe del riesgo que corren los operadores, pero los mantiene sin las normas de seguridad, para no detener la producción porque pierde ingresos, “a ellos no les importan nada más que la producción, no importa que no se les den medidas de seguridad a los trabajadores” indicó.
El representante legal de Pérez Soto dijo que a la demanda laboral es para que se le restituyan sus derechos laborales y de las asistencias médicas necesarias para el extrabajador.
Con la pérdida de tres de sus cinco sentidos Jorge Luis está incapacitado para trabajar de por vida y necesita estar bajo cuidado permanente, ya que no puede valerse por sí mismo.
Agregó que es la falta de capacidad para trabajar afectará a su familia, pues representa la pérdida del ingreso laboral que sería de por lo menos 20 años de acuerdo a su edad.