El doctor Héctor Mayagoitia, ampliamente conocido en el estado de Durango, dejó una huella indeleble como gobernador, educador y servidor público ejemplar.
Este miércoles 4 de octubre, la comunidad politécnica se encuentra de luto. Ha sido anunciado el fallecimiento del doctor Héctor Mayagoitia Domínguez, exgobernador de Durango y exdirector del IPN, instituto del cual fue un hombre clave.
Fue mediante las redes sociales del Politécnico Nacional donde se dio a conocer el deceso, ofreciendo condolencias y sumándose a tan sentida partida para la comunidad académica mexicana.
"El Instituto Politécnico Nacional se sume en la nostalgia por el sensible fallecimiento del Dr. Héctor Mayagoitia Domínguez, un hombre clave en la historia de nuestra institución. Lo recordaremos con cariño. Descanse en paz", se lee en las redes sociales oficiales del IPN.
HOMBRE CLAVE PARA EL IPN
El doctor Hector Mayagoitia, ampliamente conocido en el estado de Durango, dejó una huella indeleble como gobernador, educador y servidor público ejemplar. Nacido el 7 de enero de 1923 en Durango, su vida estuvo marcada por un compromiso constante con el desarrollo de su comunidad y la educación.
Durante su mandato como gobernador (1974-1980), el doctor Mayagoitia Domínguez se destacó por su dedicación a la obra pública integral que benefició a los ciudadanos de la región, consolidando su posición como uno de los gobernantes más recordados en la historia del estado.
Su trayectoria académica comenzó en Gómez Palacio, donde asistió a la Escuela Secundaria para Hijos de Trabajadores y luego se trasladó a la Ciudad de México para cursar la Preparatoria para Hijos de Trabajadores. Posteriormente, se graduó como Químico Bacteriólogo y Parasitólogo en la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto Politécnico Nacional. Continuó su formación académica con éxito, obteniendo un Doctorado en Química de Suelos en la Universidad de Rutgers en Nueva Jersey, Estados Unidos.
Desde una edad temprana, el doctor Héctor Mayagoitia mostró interés en las causas estudiantiles, liderando la sociedad de alumnos de su Escuela de Ciencias Biológicas y desempeñando roles significativos en la Federación Nacional de Estudiantes Técnicos (FENET) y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
Su compromiso con la educación lo llevó a desempeñar roles clave en la reestructuración de la educación media tecnológica en México, contribuyendo a la creación de carreras técnicas en áreas industriales, agropecuarias y forestales. Su influencia fue fundamental en la creación de instituciones educativas como los Tecnológicos Agropecuarios y de Estudios Forestales, que continúan siendo pilares de la educación técnica en México.
A nivel nacional, el doctor Mayagoitia Domínguez fue director general de Enseñanzas Tecnológicas, Industriales y Comerciales y subsecretario de Educación Media, Técnica y Superior en la Secretaría de Educación Pública. Durante su gestión, se promovió la creación de escuelas secundarias técnicas en todo el país y la fundación de Institutos Tecnológicos en diversas ciudades, incluyendo su estado natal, Durango.
Como gobernador, promovió acciones para fortalecer la educación tecnológica en los 38 municipios del estado y contribuyó al establecimiento del Núcleo Universitario adscrito a la Universidad Juárez del Estado de Durango en Gómez Palacio.
Además de su dedicación a la educación, el doctor Héctor Mayagoitia se destacó por su compromiso con el bienestar de los ciudadanos. En el municipio de Gómez Palacio, promovió la vivienda popular, la electrificación de comunidades urbanas y rurales, y la creación del Centro de Rehabilitación y Educación Especial (CREE), que atiende a personas con discapacidades.
El Parque Industrial Lagunero y la construcción del primer libramiento periférico también fueron logros notables en su gestión, que contribuyeron significativamente al desarrollo industrial y agropecuario de la región.
El doctor Mayagoitia, quien tuvo la oportunidad de dirigir al Instituto Politécnico Nacional durante el período 1979-1982, es recordado como un paisano, docente, humanista y servidor público ejemplar. Su legado fue motivo de inspiración, lo cual se reconoció al celebrar recientemente su centenario vital en una emotiva reunión de la comunidad politécnica de México, resaltando su vida y obra como un testimonio del impacto positivo que puede tener un líder comprometido con la educación y el servicio público en su comunidad y en todo el país.