Este es el primero de los conciertos para violín que forman parte del II cimento dell'armonía e dell'invenzione. «Le quattro stagioni» o Las cuatro estaciones es el título de la serie de cuatro conciertos para violín y orquesta, La primavera, El verano, El otoño y El invierno. Los cuatro conciertos entran dentro de lo que se denomina Música programática, es decir, música que invita al escucha a percibir imágenes sonoras de sentimientos o escenarios naturales.
En este caso, se trata de describir con música elementos característicos de las 4 estaciones del año. Pero vayamos a la Primavera: Concierto para violín en Mi mayor "La Primavera" RV. 269. 1er movimiento Allegro: todo es alegría. El frío ha terminado. La música nos proyecta una sensación de luz y de esperanza. Después de una breve y gozosa introducción, viene la primera escena donde los pajarillos dejan escuchar. Este efecto se logra entre el violín solista y los primeros y segundos violines.
La segunda parte hace una descripción de brotes de agua con efectos de ondas que fluyen libremente. Sin embargo el agua no se queda ahí, sino que encuentra su cause en riachuelos dibujados por los violoncellos, en donde el violín solista marca el libre y delicado fluir del agua. Tercer acto. Súbitamente se nuble el cielo para presenciar el fragor de la tormenta. Son truenos y relámpagos. El violín solista en un pasaje virtuoso describe los truenos y los relámpagos en rápidas escalas ascendentes. La orquesta está sosteniendo la escena con intensos y dinámicos trémolos. Cuarto acto.
Después de la tormenta viene la paz. Los pájaros vuelven a cantar. El solo vuelve a brillar y el violín solista retoma el tema principal para concluir la escena. Segundo movimiento: Este momento describe musicalmente tres escenarios de forma simultánea, a saber: Un pastor que en plena tranquilidad cae dormido y se ve envuelto de dulces sueños. Estos sueños son dibujados por el violín solista. Por su parte, los violines primeros y segundos describen el efecto de la brisa y el murmullo de las plantas agitadas dulcemente por el viento. El tercer aspecto de éste movimiento lo encontramos con las violas que logran proyectar nítidamente el ladrido de un perro. Tercer movimiento, Allegro. Es una danza pastoril. El violín se encarga de presentar un motivo saltarín a manera de danza estilo lombardo. Los pastores bailan alegremente, pero lo hacen bajo el cobijo de una gaita que es simulada por el violín solista con un ataque a doble cuerda generando efectos sonoros y brillantes.
En nuestra condición de seres humanos necesitamos comunicarnos a través de cualquier tipo de lenguaje con otros para crear una sociedad. El lenguaje se crea gracias a las imágenes que estamos adquiriendo a través de los sentidos. El lenguaje es el instrumento que tiene el pensamiento para transmitir imagen tomada por los sentidos para poder comunicarla al otro. Vivaldi logró transmitir una idea precisa, y quizá lo fue porque no hubo palabras.