Entre la corrupción que tanto ha empantanado este sexenio, una de las instituciones que más ha destacado por este mismo flagelo lo es Seguridad Alimentaria de México (SEGALMEX).
Creada oficialmente por el actual mandatario como una nueva Secretaría con fines supuestamente altruistas y sociales, teniendo por divisa principal el "combate a la pobreza extrema y alimentaria"-que este sexenio ha aumentado con más de 4 millones de nuevos pobres-ha venido a cumplir todo menos su cometido.
De hecho, si en algo ha destacado esta dependencia del actual Gobierno Federal ha sido debido a que cuenta con denuncias por desfalco al erario, mismas cuya cantidad asciende a más de 20 mil millones de pesos, de acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación; esto es, 3 veces más que el monto que se le imputaba como fraude similar a la "Estafa maestra" durante el sexenio anterior.
Sin embargo, ahora ha trascendido no solo por el rubro de lo que debería de ser su competencia sino en el ámbito internacional también, luego de que las autoridades aduaneras de China incautaran costales de frijol y de maíz, con los sellos de esta dependencia y del Gobierno Federal, repletos de metanfetaminas provenientes de nuestro país.
Según el Diario South China Morning Post, las autoridades de Hong Kong lograron la mayor incautación de drogas provenientes del extranjero con destino a aquel país, asegurando metanfetaminas y cristal que se encontraban escondidos en el interior de diversos tipos de caracoles en costales de SEGALMEX con un valor que asciende a los 82 millones de dólares convirtiéndose en el decomiso de drogas más grande de su historia, además de la captura de 4 personas involucradas.
Desafortunadamente esta no es la primera vez que esto ocurre, como refiere Héctor de Mauleón, quien subraya como desde fines del año pasado se aseguró que la confiscación de metanfetaminas había crecido 280% en relación con el año anterior, en tanto que el Gobierno de Hong Kong declara que cada vez llegaba a Asia más droga procedente de México, pues los narcotraficantes mexicanos habían logrado aumentar la potencia de esta droga, que cada vez era más buscada:
"En marzo de 2022 volvió a ocurrir el mayor decomiso de metanfetaminas en la historia de Hong Kong: 700 kilos. Otra vez se trataba de droga mexicana cuyo destino final era Australia (en donde las ganancias podrían triplicarse). Aquel cargamento iba repartido: la mitad oculto en equipo industrial pesado; la otra, camuflado entre caucho industrial. Según la oficina de drogas del departamento de aduanas, el envío se había organizado desde México a través de una empresa logística de China continental a la que se le pidió buscar una empresa en Hong Kong para recibirlo y almacenarlo.
En septiembre y octubre de 2022 siguió lloviendo droga mexicana. Dos toneladas de metanfetamina líquida fueron enviadas en botes de agua de coco. Era la incautación más grande en la historia de Hong Kong. Poco después se hallaron 100 kilos más en un hueco practicado en maquinaria industrial".
El deslinde por parte de la dependencia no pudo ser menos que insuficiente a través de un comunicado donde aseguraba que "Nosotros no realizamos exportaciones", como si se tratara de un mantra que por si mismo lo explicara todo.
Por su parte el Presidente López, con risa similar a cuando se burlaba de las masacres, se dedicó no a deslindarse del hallazgo ni a desmentir cualquier posible responsabilidad de la institución involucrada durante su homilía mañanera, sino a acusar a los medios de comunicación de haberse puesto todos de acuerdo en un "nado coordinado" para difundir esta noticia, en la voz titubeante de su vocera García Vilchis.
La gravedad de lo anterior radica en que este tipo de actividades se han detonado de manera exponencial en este sexenio, en el que se ha fracasado en cuanto a su competencia de salvaguarda de la seguridad nacional, en el interior al igual que en sus fronteras y costas.