Activistas aseguran que los discursos de odio contra la comunidad LGBTI se han recrudecido.
"Pareciera que la homofobia no tiene fin", expresó Pablo Navarrete, activista, abogado en materia de derechos humanos e impulsor de la Primera Encuesta LGBTIQ+, durante la presentación de los resultados en La Laguna de Durango.
Y es que de acuerdo a las respuestas que se obtuvieron de las 1530 personas que participaron en el ejercicio, que representa cerca de un 1.5 por ciento de la población mayor de 15 años que se identifican como parte de la comunidad LGBTI en la entidad de acuerdo con datos del INEGI, "da un panorama desalentador y victimizante", dijo Navarrete.
De acuerdo con el activista, también con el homicidio de le magistrade Ociel Baena, se han recrudecido los discursos de odio en redes sociales, por lo que prevé una mayor violencia hacia la comunidad.
Según los resultados de la primera encuesta, en la que además se contó con el acompañamiento de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Durango, el 68.8 por ciento de los participantes, dijo haber experimentado temor y peligro en su entorno.
Además de que el 62 por ciento dijo haberse vivido o conocido un caso de discriminación dentro de su propia comunidad.
"A como vamos estaremos acumulando cerca de 500 crímenes de odio de 2028 a 2022 en México, lo cual nos habla de una terrible realidad de la situación de violencia que existe en nuestro país por motivos homofóbicos, y el crimen de le magistrade Ociel está trayendo como consecuencia un recrudecimiento de esta violencia. Precisamente ayer (miércoles) recibí tres asuntos de amenazas de muerte de activistas de distintas entidades, en este contexto de linchamiento social", comentó el activista.