PSG empató como visitante 1-1 con Borussia Dortmund y se metió a los octavos de final de la Champions League.
l PSG sacó un punto trabajado en el Signal Iduna Park ante el Borussia Dortmund (1-1) que, unido al triunfo del Milan 2-1 en Newcastle, le sirve para pasar como segundo de grupo a octavos, en un partido muy entretenido y lleno de ocasiones.
Necesitaba ganar el PSG para evitar mirar al otro encuentro del grupo y ser además primero. Y pudo hacerlo, aunque le faltó acierto en el remate. Mbappé completó un buen partido, pero no rompió su sequía goleadora a domicilio en esta fase de grupos.
Que la primera parte acabara sin goles fue casi un milagro. El resultado lógico hubiera sido un 2-2, porque ambos equipos gozaron de oportunidades de sobra para marcar y tanto Kobel como Donnarumma sacaron buenas manos.
Exigió primero Reus a Donnaruma y lo mismo hizo, desde lejos, Vitinha con Kobel. Wolf se quedó solo dentro del área, pero tiró desviado. Casi acto seguido, Süle salvó, estirando una pierna desde el suelo, un remate flojo con la zurda de Mbappé, después de driblar al portero alemán, y Barcola mandó poco después un tiro al palo.
En los mejores minutos del PSG, antes de la media hora, Kolo Muani no pudo superar a Kobel en el uno contra uno, igual que al final de la primera parte.
Reus, de nuevo, y Adeyemi, a un rechace de Donnarumma y con el portero ya vencido, tampoco pudieron marcar, mientras de Newcastle llegaban noticias de un gol del equipo local que dejaba fuera de la competición al conjunto de Luis Enrique.
Hakimi se convirtió en el desgraciado protagonista del gol del Dortmund. Perdió la pelota en la salida con Bensebaïni y Fülkrug regaló el tanto a Adeyemi.
El PSG se acercaba al abismo, pero de ahí lo sacó pronto Zaïre-Emery, que culminó una buena internada por banda de Mbappé.
Tras unos minutos de dudas, el Dortmund recuperó el mando. Donnarumma respondía a un buen disparo de Malen. El Milan empataba en St James' Park.
El encuentro bajaba una marcha, aunque el PSG lo seguía intentando. Mbappé, con la zurda, disparó fuera por poco. El VAR le anulaba por centímetros a la estrella francesa un gol después de haber vencido finalmente a Kobel en un mano a mano. Y Barcola definía inocente a las manos del portero con la zurda otra buena contra.
Parecía inminente el gol para el PSG, pero no acababa de llegar. Lo que sí llegó fue la remontada del Milan, que daba tranquilidad a los franceses, clasificados seguro con el empate pero fuera si perdían.
