Existe una necesidad en Torreón de contar con una nueva tratadora para cumplir con la norma.
El alcalde Román Alberto Cepeda González dijo que no hay nada definido todavía en relación a la tecnología para la planta tratadora de aguas residuales que se pretende construir para Torreón, solamente lo que corresponde a los procedimientos del Cabildo y de la Legislación.
"Se han presentado alternativas por parte de los consejeros de Simas, para que vayamos con mucha claridad sobre lo que se ocupa y con una visión de 25 a 50 años", expresó.
Señaló que existe una necesidad real en este municipio de contar con una nueva planta tratadora para cumplir con la normativa federal, pero reconoció que existen diferentes procesos tecnológicos, por lo que se revisa tanto la parte financiera como la técnica, operativa, que sería directamente observado por el consejo del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas) Torreón.
Indicó que no se tiene todavía una fecha de licitación para este proyecto, consideró que "todavía hay tiempo para eso". El alcalde dijo que esta obra va más allá de su administración, pero se buscaría consolidarlo dentro de su gestión.
"El proyecto trasciende, nos toca hacerlo a nosotros por un mandato de Ley, pero el proyecto es una visualización de lo que requiere Torreón en materia de tratamiento de agua para los próximos 50 años", expuso.
Como se informó oportunamente en este medio, el Congreso del estado de Coahuila ya recibió la solicitud de aprobación del Municipio de Torreón para obtener un financiamiento para la construcción de la nueva planta tratadora de aguas residuales, misma que será revisada dos veces por los diputados, primero en la comisión de Finanzas y luego en la de Gobernación, lo que podría tomar hasta dos meses y medio.
NORMA Y ESCENARIO DE LA LAGUNA
La Norma Oficial Mexicana NOM-001-SEMARNAT-2021 establece los límites permisibles de contaminantes en las descargas de aguas residuales, entró en vigor a partir del 3 de abril de este año y se han tenido que solicitar prórrogas para no caer en multas por incumplimiento, las cuales alcanzan hasta 14 millones de pesos.
Según estimaciones de Simas, la industria de la Región Lagunera requiere de 700 litros de agua tratada para operar y actualmente utiliza agua potable de la red. Esto debido a que la Planta Tratadora de Aguas Residuales no cumple con la disposición en cuanto a los límites establecidos en la norma, además, por la tecnología que utiliza para llevar a cabo el proceso, es deficiente e insuficiente.
El agua tratada no puede ser utilizada por la industria actual por no cumplir dichos parámetros, con las condiciones mínimas requeridas, lo que al sistema le representa una fuga de ingresos al no poder comercializar el agua bajo estos lineamientos.
En marzo, Simas sometió a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) el proyecto de modernización, ingeniería básica, detalles de construcción de la PTAR para su análisis y validación. Con base a ello, el Cabildo aprobó la búsqueda de alternativas de contratación de financiamiento para su materialización, por un monto de 680 millones de pesos, en un esquema de inversión pública productiva, a un periodo máximo de 240 meses.