En noviembre de 2018 cantó en Torreón, desde entonces no se le vio por estas tierras que tanto aprecia, hasta el día de ayer.
Carlos Rivera volvió y lo hizo por la puerta grande ante un “sold out” que lo esperaba con ansias en el Coliseo Centenario, en donde alzo el vuelo gracias a su gira Un tour a todas partes.
Carlos tiene raíces laguneras, y es que su familia materna es originaria de Matamoros, Coahuila; es por eso que cada que viene se siente como en casa y esta vez no fue la excepción.
Los miles de laguneros que fueron anoche al Coliseo arroparon a Carlos con su cariño, algo que a él evidentemente le entusiasmaba, correspondiéndoles con sonrisas y su entrega total.
Las puertas del recinto abrieron a las 19:00 horas. Grupos de amigos, parejas y hasta familias llegaban con toda la actitud, pese a lluvia, de pasar una velada agradable “tripulada” por el egresado de La Academia.
Melina López, no se encuentra en ningún club oficial de fans de Carlos, pero eso no es problema para que ella lo idolatre.
“Tengo gorras, playeras y sudaderas de Carlos. Siempre que puedo voy a verlo. Es nuestro nuevo Chayanne”, mencionó a El Siglo de Torreón.
Cuando el reloj marcó las 10:00 de la noche, una de las coristas del artista, Charlie Arain, simuló ser una azafata, entró al entarimado y dio las indicaciones a la tripulación de Torreón (El público) con el fin de arrancar el viaje musical.
Carlos irrumpió en el escenario, provocando que los ánimos de los “riveristas” estallaran, desde ese momento y hasta el final del show, en el que hubo de todo, incluyendo risas y lágrimas.
El tour se divide en segmentos, entre ellos, México, Madrid y París. Con el tema, Un viaje a todas partes comenzó el espectáculo, cuyo escenario simulaba un aeropuerto a través de variadas imágenes.
La pareja de Cynthia Rodríguez vistió de negro. Traía un saco de piloto y un pantalón ajustado que atraía las miradas del público, sobre todo cuando él movía su cuerpo; sus bailarines portaron atuendos similares.
“Buenas noches Torreón, ¡qué ilusión volver a estar aquí en la tierra de mi madre!, en esta Comarca Lagunera que siempre me ha dado tanto. Esta noche, Torreón, soy todo tuyo y tú me disfrutarás como tú quieras”.
El primer bloque, dedicado a México, incluyó los temas Escapémonos, 100 años, Todavía no te olvido o Ya no vives en mí.
Un momento especial se suscitó cuando el astro mexicano entonó el tema Recuérdame, de la película de Disney, Coco, inspirada en el Día de Muertos. Antes de finalizar la melodía, aparecieron en las pantallas, imágenes de laguneros fallecidos, como Hiromi Hayakawa, las cuales se mandaron previamente a las redes sociales de Carlos.
Hombres y mujeres cantaban con el intérprete. Hubo quienes llevaron flores y pancartas, una de ellas decía: “Carlos, quiero darte un beso”.
Enseguida, el artista ofreció La Luna del cielo, El hubiera no existe y Sería más fácil, éste tema se lo dedicó a su padre, José Gonzalo Gilberto Rivera Ramírez, fallecido en agosto de 2022.
“Quisiera que todos esos que tenemos el corazón roto, juntemos todos esos pedacitos para formar uno solo”, exclamó en alusión a la partida de su papá.
Más tarde, el tour se fue para Madrid, ciudad a la que Carlos aprecia muchísimo, ya que ahí protagonizó la obra El Rey León, proyecto que le dio proyección internacional.
Para esta parte del show, los bailarines volvieron al escenario, pero esta vez vestidos como bailaores de flamenco. Mientras ellos hacían lo suyo, el artista, con una camisa blanca, complació a la audiencia con Alguien me espera en Madrid, Deja amarte y Regrésame mi corazón.
A lo largo del concierto, al que asistieron la mamá y la abuela de Carlos, de igual manera sonaron clásicos como Fascinación, Que lo nuestro se quede nuestro y Cómo pagarte.
(FOTOS: VAYRON INFANTE)
