Las declaraciones que Susan Sarandon hizo en una huelga en contra de la guerra entre Israel y Hamás le han traído consecuencias. EFE
Las declaraciones que Susan Sarandon hizo en una huelga en contra de la guerra entre Israel y Hamás le han traído consecuencias, pues luego de causar indignación por emitir comentarios antisemitas, la actriz de 77 años fue excluida de la agencia que la representaba desde hace nueve años, y aunque en principio, parecía que no se retractaría, a 15 días de lo ocurrido, la famosa pidió disculpas a quienes hirió con sus dichos y hace una profunda reflexión de la persecución de la que también han sido víctimas las y los judíos.
A partir del 7 de octubre, cuando Hamás atacó el territorio israelí y, poco tiempo después, Palestina se vio afectada por el contraataque de Israel, se ha perdido la vida de miles de personas, mientras que otras tantas sufren de persecución y de la incertidumbre que les ha producido desconocer en dónde se encuentra sus familiares, tomados como rehenes.
En este contexto, hay quienes han abogado por una de las partes, como fue el caso de Susan Sarandon, quien a lo largo de los años se ha dado a conocer por su activismo político; sin embargo, en esta ocasión, la actriz fue condenada por haber emitido comentarios desafortunados que sugerían que el pueblo judío no conocía lo que era la persecución, postura que fue tomada como antisemita.
"Hay muchas personas que tienen miedo de ser judías en este momento y están empezando a probar lo que se siente al ser musulmán en este país, tan a menudo sujeto a la violencia", dijo durante su intervención en la protesta que tuvo lugar en Union Squeare, en Manhattan.
Como resultado de sus dichos, la agencia de actuación que la representó desde 2014, United Talent Agency, tomó la decisión de dejar de trabajar con la actriz; sin embargo, Susan no emitió ninguna opinión acerca de la consecuencia de sus palabras, sino hasta ahora, dos semanas después de lo ocurrido.
La actriz recurrió a su cuenta de Instagram, este viernes, y compartió un extenso mensaje donde, además de pedir disculpas, explica el contexto en que sucedieron los hechos, pues destacó que, si bien, se presentó en la huelga, no estaba programado que ella hablara en público, así que al ser invitada a pronunciarse en voz alta, improvisó y no midió sus palabras, las cuales -reconoció- partieron de un argumento sujeto a mucho desconocimiento de la historia del pueblo judío.
"Recientemente, asistí a una reunión de alta convocatoria donde un grupo de activistas buscaban resaltar la crisis humanitaria que tiene lugar en Gaza y hacer un llamado de alto al fuego. No tenía planeado hablar, pero fui invitada a subir al escenario y dije un par de palabras", introduce la actriz.
"Tratando de comunicar mi consternación por el aumento de crímenes de odio, dije que los judíos americanos, como el objetivo del creciente odio antisemita, ´están comenzado a probar lo que se siente al ser musulmán en este país, tan a menudo sujeto a la violencia´. Esta frase fue un terrible error, ya que sugiere que hasta hace poco los judíos habían sido ajenos a la persecución, cuando la verdad es todo lo contrario", prosigue.
"Ya que como sabemos, por siglos de opresión y genocidio en Europa, como lo que ocurrió en el tiroteo a la sinagoga ´Árbol de la Vida´ en Pittsburgh, Pensilvania, los judíos han estado familiarizados con la discriminación y la violencia que continúa hasta nuestros días", expone.
"Estoy profundamente arrepentida por el dolor que causé a las personas con ese comentario, mi intención era mostrar mi solidaridad en esta lucha contra el fanatismo en todas las formas y lamento tanto haber fallado en el intento de hacerlo. Seguiré con mi compromiso con la paz, justicia y compasión para todas las personas. Espero que, con amor y voluntad, podamos comprometernos al diálogo, especialmente con aquellos con quienes discrepamos", finalizó.
Hasta el momento, el mensaje cuenta con más de 30 mil reacciones y ningún comentario, debido a que la actriz prefirió desactivar los comentarios de la publicación.