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El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, prometió este lunes que convertirá a su país en el décimo exportador mundial si gana las elecciones de junio, tras destacar el "récord" del volumen de ventas en 2022, pero sin recordar que la fuerte devaluación de la lira turca contribuyó al incremento.
"Me gustaría expresar aquí con gran orgullo y placer: en 2022, nuestras exportaciones aumentaron un 12.9 % y alcanzaron los 254 mil 200 millones de dólares", dijo Erdogan ante la Asamblea de Exportadores Turcos.
"Esta cifra es el récord de la historia de nuestra República", añadió el mandatario, sin mencionar tampoco el encarecimiento simultáneo de las importaciones que supuso la caída de la moneda nacional.
Según los datos más recientes del instituto de estadísticas de Turquía TÜIK, en los primeros nueve meses de 2022, las importaciones totalizaron un volumen de 271 mil 249 millones de dólares, un 40.4 % más que en el mismo periodo del año anterior.
Simultáneamente, las exportaciones sumaron 188 mil 152 millones de dólares entre enero y septiembre pasados, con una subida interanual del 17 %, claramente inferior a la de las compras.
Entre enero de 2021 y septiembre de 2022, la lira turca se devaluó un 60 % con respecto al dólar.
Ante los representantes de las empresas exportadoras, Erdogan pidió apoyo para hacer realidad su "próximo objetivo, que es convertir a Turquía en uno de los 10 principales países exportadores del mundo".
En la lista de los mayores exportadores mundiales de 2021 elaborada por Naciones Unidas en base al volumen de ventas en dólares, Turquía ocupa el puesto 27.
Y, según los cálculos publicados por el Fondo Monetario Internacional (FMI) en 2022, la economía turca es la vigésimo primera del planeta.
