La contaminación se ha convertido en uno de los desafíos más apremiantes de nuestro tiempo, amenaza no solo nuestra salud sino también la salud del planeta. Estamos siendo testigos de niveles alarmantes de contaminación en nuestro aire, agua y suelo. A tal grado que por su origen y por el posible impacto que podría tener en la salud, podríamos estar viviendo una nueva época del hombre: la del hombre de la Tabla Periódica.
Para quienes no están relacionados con estos términos diré lo más básico: que la tabla periódica de los elementos es un registro de todos los elementos químicos conocidos por la humanidad. Los cuales fueron organizados en forma de tabla o de diagrama por primera vez por el químico ruso Dimitri Mendeleyév hace aproximadamente 190 años. Se trata de un diagrama de organización y clasificación de todos los elementos químicos conocidos en forma de grupos e hileras.
Gases tóxicos y químicos provenientes de las industrias, los vehículos y la deforestación, están llenando nuestra atmósfera. Las intervenciones extractivas sobre la naturaleza como la minería y la agricultura nos aproximan a elementos químicos, que en condiciones normales no sucedería.
La contaminación ambiental es sólo uno de los componentes de la crisis ambiental actual. Quien llamó por primera vez la atención hacia este tema fue Raquel Carson con su famoso libro La Primavera Silenciosa. Aunque años antes Clair Cameron Patterson, geoquímico de la Universidad de Chicago había encontrado cantidades anómalas de plomo tanto en medios líquidos como terrestres. Esto lo convirtió en un activista que luchó buena parte de su vida por eliminar el plomo de las gasolinas.
La contaminación ambiental es global, pero existen regiones que sobresalen en este nada honroso tema, tal es el caso de La Comarca Lagunera, donde dos de sus principales actividades económicas están estrechamente correlacionadas con el tipo de contaminación ambiental que se presenta, y somos también un claro ejemplo del Hombre de la Tabla Periódica.
Hace unas semanas asistí a la presentación de resultados de un Programa Nacional de Investigación e incidencia (PRONAII) en el tema de salud y medio ambiente, liderado por el Dr. Gonzálo García Vargas, de la Universidad Juárez del Estado de Durango. De acuerdo con los resultados expuestos el arsénico en el agua subterránea, además del flúor que también aparece con concentraciones elevadas, serían los dos primeros elementos químicos de la tabla periódica que contaminan el agua que aún tenemos en el grifo o llave del agua y que de acuerdo con lo expuesto por el Dr. García Vargas, documenta ampliamente la presencia de arsénico en los organismos de las personas incluídas en la muestra estudiada, tanto del área rural como urbana de la Comarca Lagunera. El Arsénico pertenece al grupo 5 y el Flúor al grupo 17 de la Tabla Periódica.
La contaminación del Aire fue presentada por la Doctora Ofelia Morton. Sus datos provienen del análisis de material particulado (PM10), se encontraron los siguientes elementos químicos en el aire que respiramos: concentraciones importantes de talio y bario que pertenecen a los grupos 2 y 13 respectivamente de la tabla periódica, al grupo 5 pertenece el Vanadio, se encontró Manganeso que pertenece al grupo 7, la Plata y el cobre que pertenecen al grupo 11, el cobalto del grupo 9 y el Cromo del grupo 6, al grupo 12 pertenecen el Cadmio y el Zinc, el plomo se encuentra en el grupo 14, mientras que el Antimonio pertenece al grupo 15.
Todos estos elementos químicos se encontraron en concentraciones que pueden afectar la salud de las personas y de los ecosistemas. Recordemos que todos estos metales y metaloides se encontraron en el material particulado, también llamado contaminación por partículas, esto significa que el vehículo para llegar hasta nuestros pulmones son partículas invisibles pero inhalables, que sólo pueden verse con la ayuda de un microscopio electrónico y que por lo general miden 10 y 2.5 micrómetros (PM10 y PM 2.5), donde un micrómetro, micrón o micra es igual a la milésima parte de un milímetro. Las fuentes de esta contaminación son principalmente las empresas metalúrgicas y las fuente móviles.
El panorama de contaminación regional es completado con la contaminación de suelos y agua por pesticidas organoclorados y organofosforados que también aparecieron en la orina de las personas que fueron parte de la muestra: se identificó el DDT y metabolitos relacionados, así como Lindato. Entre los organofosforados se encontró el Malation y Paration. También se encontró el herbicida estrella de los cultivos transgénicos el Glifosato.
Como se puede apreciar todo esto conforma una Región de Emergencia Ambiental y Sanitaria, que constituye una crisis socioambiental, se dice social porque es socialmente provocada y porque esto abre la posibilidad de una solución también social provocada.