Ahondar en las diferencias que hay entre hombres y mujeres no tendría fin. Son muchas y usted, lo sabe.
Estos desacuerdos fueron llevados al teatro a través de una manera divertida, gracias a la obra Los hombres son de Marte, las Mujeres de Venus, que abrió telones ayer en el Teatro Nazas.
Angelique Boyer y Sebastián Rulli fueron los encargados de ofrecer el montaje inspirado en el libro de John Gray del mismo nombre, que ha sido un éxito en ventas.
La dupla reafirmó en La Laguna la buena química que hay entre ellos, que no solo se da en sus vidas personales como pareja, sino también cuando trabajan juntos en algún proyecto. Risas, reflexiones, romance y algunos tips para que novios o esposos puedan preservar su relación salieron a relucir en las dos funciones que ofrecieron.
Las “Rullináticas” (como se hacen llamar las fans del actor) y por supuesto seguidores de Boyer iniciaron su arribo pasadas las 18:00 horas. “Hoy -ayervenimos a ver al ‘papucho’ de Sebastián, nos lo ganó Angelique, ¿qué le vamos a hacer?”, dijo la joven Susana Garza a El Siglo de Torreón.
En cambio, Carlos Lozada, traía una revista donde venía en portada Angelique, con la esperanza de que la actriz le escribiera en ella su autógrafo. “Amo a Angelique, soy feliz compartiendo sus videos y reels de Teresa”, contó entre risas. A las 7:10 de la tarde comenzó la primera función. Angelique entró al escenario con un elegante vestido negro; Rulli, con pantalón negro y una chaqueta roja. “Corina” y “Luis”, se llaman sus personajes.
El primer tema que tocaron fue la limpieza y la organización en un hogar, algo que comúnmente las mujeres se esfuerzan más en mantener. Los asistentes, en especial las féminas, estuvieron pendientes de cualquier movimiento del argentino y, por supuesto, de lo que decía.
“Nosotros, cuando vamos a un lugar, a cenar, por ejemplo, estamos listos con tiempo, pero siempre pasa que ellas tardan mucho en arreglarse y se nos va el tiempo esperando”, contó “Luis” refiriéndose a “Corina” Ella, en cambio, explicó que los varones no se meten tanto en problemas, ya que buscan soluciones rápidas a cualquier situación. “Y sí, cuando viajamos llevamos lo esencial.
Con dos pares de calcetines basta.
No nos la complicamos tanto”, reafirmó “Luis”. Con la idea de que damas y varones no son iguales, el montaje escénico atrapó de principio a fin a cada espectador por su agilidad, sentido del humor y coherencia.
“Los hombres y las mujeres no somos iguales, somos muy diferentes”, dijeron en varios momentos de este trabajo escénico.
Aparte de situaciones chuscas, Los hombres son de marte... entregó momentos de reflexión que dejaron en claro que ninguna pareja es perfecta y por eso, “El amor se cultiva a diario”.
El público de igual manera se deleitó y hasta soltó carcajadas cuando ambos personajes trataron asuntos relacionados con el sexo.
Tal y como dijo Sebastián Rulli en una pasada entrevista con El Siglo de Torreón, los laguneros que presenciaron la puesta en escena entendieron que una pareja puede resolver sus diferencias siempre y cuando haya amor de por medio.
Obra 'Los hombres son de Marte, las Mujeres de Venus' de Angelique Boyer y Sebastián Rulli en Torreón (EL SIGLO DE TORREÓN/ ENRIQUE CASTRUITA)